lunes, 16 de septiembre de 2013

Solo 4. Edición 487, del 14 de SETIEMBRE de 2013. Año IX

LA CITA:

« La nave está por iniciar su travesía
Llueve desde la víspera
Y no sabes qué fiambre llevar
Qué novela
Qué fotografía
Qué última caricia.»


Hildebrando Pérez, Cahier Noir

LO ÚLTIMO: ¡A un sol nomás casero!

Whynot magazine, la revista de bolsillo que concita a atención de culturosos, fotógrafos, periodistas, diseñadores, andariegos y lectores sin sosiego, salió en su decimoséptima edición.
En este número de setiembre - octubre, Whynot trae consigo un reportaje gráfico a las sahumadoras del Señor de los Milagros, los portafolios del gran Edward Weston y del arte "chicha" de Ruta Mare, un homenaje a Mafalda, una crónica sobre Chacamarca (centro administrativo inca de Chinchaycocha) y otra por Halloween, poesía, ficciones, vinos, libros, discos, películas, tecnología y mucho más.

Búsquela en librerías Íbero y La familia, o en quioscos del centro de la ciudad. Sesenta páginas a todo color, impresas en la mejor calidad. Nada que envidiar a otras publicaciones de la capital, demostrando que Huancayo también tiene lo suyo. Lo mejor de todo es el precio: ¡a un sol nomás casero!

El nobel de la paz y la guerra

Jhony Carhuallanqui

Foto: Josh Lederman
Cuando en 2009 el Premio Nobel de la Paz fue concedido a Barak Obama, muchos quedaron sorprendidos (o decepcionados) y cuestionaron tal mérito, pues era atrevidamente opuesto al testamento de Alfred Nobel, en el que se establece que tal distinción correspondería «a la persona que haya trabajado más o mejor en favor de la fraternidad entre las naciones, la abolición o reducción de los ejércitos existentes y la celebración y promoción de procesos de paz».
Por aquel entonces, EE.UU. lideraba una ofensiva contra Afganistán e Irak que tuvo como colofón la ejecución de Saddam Hussein y luego la de Osama Bin Laden, que si bien eran sujetos despreciables por sus prácticas terroristas (incluso contra la población civil), debieron ser juzgados en procesos “más transparentes” ante la comunidad internacional, que al margen de querer una sanción ejemplar, no debe desconocer los derechos fundamentales que todo individuo tiene.
La indignación fue mayor cuando al recibir el premio, Obama justificó la “necesidad” de las guerras y planteó la teoría de la “guerra justa”, además argumentó que la “no violencia” de Gandhi o la de Luther King no habría detenido a Hitler y que no serviría contra Al Qaeda, desmereciendo así las iniciativas organizativas creadas justamente para evitar estos hechos, como es el surgimiento de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), cuyo objetivo principal es la de «garantizar la paz y seguridad internacional» y buscar los medios necesarios para resolver los conflictos y, de ser necesario, ver los mecanismos de sanción en base al derecho internacional.
Ahora la decisión de Obama de atacar Siria, fundamentada en la “sospecha razonable” de que el gobierno de Bachar Al Asad habría utilizado armas químicas contra los rebeldes, causando la muerte de, al menos, 1400 personas entre mujeres, ancianos y niños, no tiene el aval de la ONU; es más, este organismo debiera autorizar —sólo en una situación extrema— la intervención militar, por lo que la actitud “matonesca” de EE.UU es un desconocimiento descarado al organismo de paz mundial más importante que agrupa a 193 países del orbe.
Al final, si existen evidencias del uso de estas armas, los responsables tendrán que ser sentenciados, pero ello no implica arrasar con ciudades y sembrar más llanto en cientos de civiles ajenos a los excesos de los que ostentan el poder.
El problema no se resuelve con tan solo retirarle el Nobel a Obama (como ya se propuso), o que China y Rusia apoyen a Siria para “equilibrar” el conflicto, sino que pone sobre el tapete un problema mayor: la ineficiencia del derecho internacional para prevenir este tipo de situaciones y su ineficacia para resolverlo, pues la razón de la comunidad internacional es justamente crear los mecanismos disuasivos pertinentes.
Es paradójico hablar de guerra precisamente a puertas del Día Internacional de la Paz, instituido por la ONU, que se conmemora el 21 de septiembre (anteriormente era el 3er. martes) y que busca «reforzar los ideales de paz en todas las naciones y pueblos del mundo», fomentando y fortaleciendo un espíritu de diálogo y tolerancia como umbrales de una paz perdurable que, por derecho y razón, merecemos.

Dicen que la lección más importante de la historia no es sólo saber qué pasó, sino cómo evitar que se vuelva a repetir: ¿hasta cuándo el conflicto Israel - Palestina derramará más sangre?, ¿hasta cuándo habrá guerras en Somalia o Birmania?, y es que lamentablemente no terminamos de entender, después de tanto tiempo, la reprimenda de Luther King: «Hemos aprendido a volar como pájaros, a nadar como peces, pero no hemos aprendido el sencillo arte de vivir como hermanos».

2do Concurso Nacional de Cuento “Premio Solo 4”

Diseño: Robhert Pimentel
El Suplemento Cultural “Solo 4” del diario Correo de Huancayo, en el marco de las celebraciones por los 51 años de fundación de Correo en la región Junín, y el décimo aniversario de su suplemento, con la finalidad de contribuir a la producción literaria de nuestra región y país, convoca al 2do Concurso Nacional de Cuento “Premio Solo 4”, con arreglo a las siguientes bases:

Bases:

1.     Podrán participar todos los peruanos y peruanas mayores de 18 años, residentes en el Perú o el extranjero.
2.     Cada participante podrá presentar hasta dos cuentos.
3.     Los participantes concursarán bajo seudónimo por cada cuento presentado.
4.     El tema es completamente libre.
5.     El cuento deberá ser INÉDITO, escrito en español, y no haber sido presentado con anterioridad a otro concurso nacional o internacional cuyo fallo esté pendiente.
6.     La extensión máxima será de 1200 palabras, digitadas a doble espacio, en fuente Arial 12.
7.     Los trabajos se presentarán en las instalaciones del diario Correo, Jr. Cuzco n° 337 – Huancayo, en un sobre de manila CERRADO dirigido a: 2do Concurso Nacional de Cuento “Premio Solo 4”;  el cual  deberá contener:
a)  El cuento impreso por una sola cara en papel bond A4, en TRES EJEMPLARES LEGIBLES, debidamente compaginados, numerados en el extremo inferior derecho. Cada ejemplar impreso deberá contar con una carátula en la que se consignará el nombre del cuento y el seudónimo del participante.
b)  El cuento en soporte electrónico, es decir, grabado en un disco compacto (CD), rotulado con el título del cuento y el seudónimo del autor.
c)  Un sobre tamaño carta o similar CERRADO, que en su exterior consigne el correspondiente nombre del cuento y seudónimo; y en su interior una página con los nombres y apellidos del autor, lugar de nacimiento, dirección domiciliaria, dirección electrónica (e-mail), teléfono (imprescindible) y un breve resumen biográfico, además de una fotocopia simple del documento de identidad (DNI) por ambos lados.
8.     La fecha y hora límites de recepción de los trabajos será el viernes, 18 de OCTUBRE de 2013, a las 6:00 pm. Los trabajos enviados por servicio postal o courier serán considerados válidos siempre y cuando se registre en el matasellos, como límite, la fecha y hora establecidas.
9.     El Jurado Calificador estará conformado por tres escritores de reconocido prestigio nacional e internacional, y se darán a conocer sus identidades junto a su veredicto.
10.  El Jurado Calificador elegirá tres trabajos ganadores que se harán acreedores a los siguientes premios:
1er puesto: S/. 1,000.00 (Mil Nuevos Soles) y diploma de honor.
2do puesto: S/. 700.00 (Setecientos Nuevos Soles) y diploma de honor.
3er puesto: S/. 300.00 (Trescientos Nuevos Soles)  y diploma de honor.
Además, según su criterio, elegirán algunos cuentos finalistas que serán reconocidos por Menciones Honrosas.
11.  El cuento ganador, el segundo y tercer lugar serán publicados, indefectiblemente,  en una edición especial del Suplemento Cultural “Solo 4” del diario Correo de Huancayo, próxima al 51 aniversario del diario Correo. Además, junto a los finalistas, serán publicados en los sitios web oficiales de “Solo 4”, en Facebook y en el respectivo blog.
12.  El fallo del Jurado Calificador será INAPELABLE y se publicará 30 días después del cierre de la convocatoria, en el diario Correo y en su Suplemento Cultural “Solo 4”.
13.  Finalizado el concurso, los trabajos que no hayan sido premiados serán incinerados.
14.  La participación en este certamen implica la ACEPTACIÓN DE TODOS LOS PUNTOS antes señalados.
15.  La omisión de cualquiera de los estamentos en las presentes bases implicará la inmediata descalificación del cuento concursante.
16.  Los casos no previstos se resolverán a criterio del Jurado Calificador y la organización.
                                                                                       
Huancayo, julio de 2013.



COLUMNA: EL BUEN SALVAJE

Antes del trisagio: infinitud y renovación

Sandro Bossio Suárez


La tradición oral parece haberse estancado en la resignada tarea recopilatoria de los escritores de nuestras épocas. En las últimas décadas hemos asistido a una reiterativa compilación de estas tradiciones, en donde menudean los mismos mitos teogónicos, cosmogónicos y etiológicos de nuestro entorno. En ellos, los personajes machacados hasta el cansancio (con mínimos cambios en cada versión) son los del control social impuestos por la cultura católica de la Colonia: sacagrasas, cabezas voladoras, híbridos incestuales, órganos errabundos, condenados a vagar en la tierra de los vivos hasta pagar sus culpas. En fin, nada nuevo habíamos visto hasta hace poco en que apareció un libro deslumbrante que gira la moneda, entregándonos un ignorado panorama en nuestra tradición oral: Antes del trisagio.
Su autor es el poeta Gerardo Garcíarosales, quien muestra, a nuestro gusto, el mejor libro de su faceta como narrador. Nos presenta también una de las más importantes antologías de narraciones de las últimas décadas.
Hay varias cosas para decir de este libro. Por un lado, destacar la labor antropológica de su autor, quien ha recopilado (en muchos casos como producto de una recordación de los relatos escuchados en su infancia) tradiciones desconocidas por los compiladores de siempre. Por otro lado, destacar la función recreadora (y, en muchos de los 35 relatos, auténticamente creadora) de las gestas narrativas de nuestra pequeña patria.
Sobre esto, tenemos que decir que todos los relatos guardan elementos de la mitología de la zona, aun cuando no son fastos de creación popular sino fruto de propia inspiración, lo cual nos acerca a un autor complejo que no solo recoge, sino también moldea, transfigura, innova. Como un hojaldre literario, por lo delicioso y multiplánico, el libro despliega valiosas láminas de lectura.
La calidad de la narración, las técnicas y recursos modernos, la vena poética, el romancero hecho prosa, son otras cualidades formales del libro. Maupaussant y Chéjov, pero también nuestras abuelas inmortales con su fina literatura bucólica, están presentes en estas páginas inolvidables.
Todos los cuentos son de excelsa complexión, pero, desde luego, tenemos nuestros favoritos. Entre los fantásticos, recalcamos “El libro de ceniza”, donde una mujer anuncia su propia muerte; “Quinta generación”, un poderoso relato generacional, decimonónico, que da una vuelta de tuerca para presentarnos una metáfora social; y “Crudo o cocido”, un sorprendente relato gótico de perfecta visualidad.
Entre los mejores cuentos de espanto encontramos “Soledad de un condenado”, “Hora de engaños” y “Los niños de medianoche”, tres muestras de la temática mitológica (el espíritu vagante que no descansa en paz, la sempiterna procesión de cadáveres noctívagos y los fantasmas infantiles que salen por las noches de sus parvulitos podridos, respectivamente) que han sido cinceladas por una inventiva propia para convertirlos en relatos renovados. Nos gusta mucho, por su potestad tenebrosa, “La exalumna”, una pequeña obra maestra del relato de horror.
Finalmente, tenemos cuentos de trazas localistas como “Los zapatitos de la Virgen”, “Mi pequeña abuela” y “El milagro de San Antonio”, que se insertan dentro de nuestra narrativa indentitaria y tienen el aroma propio de su autor.
En suma, se trata de una antología que renueva la literaturalidad de la rica tradición oral de la zona con un registro poético no visto desde la primera mitad del siglo pasado.

No hace falta decir más. El libro, por lo extraordinario que es, lo dice todo.

Hearst Tower, un caso emblemático

Máximo Orellana Tapia

Edificio Hearst Tower (8va. avenida y la calle 57 de Nueva York).
En el siglo pasado, en los Estados Unidos se impuso el derribo y la renovación de su patrimonio arquitectónico que, a partir de los años cuarenta, originó las primeras protestas por la desaparición de valiosos monumentos. Por ello, la locución "urban renewal" (renovación urbana) —en los tratados y discusión actual sobre estos asuntos— ha quedado como sinónimo de “destrucción", es así que en el mismo corazón del Manhattan neoyorquino ahora se tiene un considerable respeto por los bienes monumentales.
En la actualidad, los foros más importantes sobre arquitectura y urbanismo, así como la obra arquitectónica más lograda, es inclusiva respecto a la obra existente de valor histórico, por eso podemos ver el caso del edificio Hearst Tower (ubicado en la 8va. avenida y la calle 57 de Nueva York) que ilustra lo expresado.
Tal como se puede apreciar en las fotografías, la torre densa, de 46 pisos y 182 metros de altura, ha conservado el anterior bloque de seis plantas catalogado como monumento por la Comisión de Preservación de Íconos de Nueva York.
Este edificio antiguo cuyas fachadas de caliza prefabricada en forma de “L” con columnas, balaustradas, esculturas y ventanas relativamente pequeñas, fue conservado y restaurado incorporando la torre nueva que establece un vínculo y “diálogo” a través de una “falda transparente y diáfana que inunda los espacios inferiores con luz natural, dando la impresión de una torre de cristal que flota ingrávidamente respetando esta condición y, muy por el contrario, obtiene partido de esta condición, al punto que el acceso principal se produce de manera singular por la construcción anterior, además de lograr ser el primer rascacielos verde de la ciudad que inserta en el desarrollo y detalles del proyecto un sinnúmero de consideraciones medioambientales.
Este edificio, concluido el año 2006, ha sido proyectado por el arquitecto británico Norman Foster y constituye una lección viva y emblemática de actuación culta y ponderada frente a un bien monumental, logrando su cometido de aprovechar el suelo urbano en la mayor densidad permisible. Esto conlleva a pensar, fundamentalmente, en la reutilización de la arquitectura preexistente, en el aprovechamiento creativo de su infraestructura, adecuándola a las nuevas necesidades. Querer es poder. 

En el entendimiento que “Patrimonio” viene a ser el conjunto de “bienes heredados de nuestros padres”, adquiridos por esfuerzo individual o a razón de la patria, las edificaciones tanto públicas como particulares, grandiosas o sencillas, construidas a lo largo de nuestro proceso histórico, devienen en conformar ello y en mutua interdependencia van a denotar la "personalidad" de una ciudad. Esta es la razón por la que cualquier población tiene un patrimonio que resguardar, y en el caso de Huancayo o cualquier otra ciudad en el Perú, con mayor razón, porque sus bienes monumentales son escasos y pueden ser contados sólo con los dedos de las manos, antes de caer en el libertinaje del todopoderoso dinero o argumentos en “defensa de la vida” como pretexto barato de destrucción.

Para esto se requiere sin duda de la implementación de una política cultural consistente, con objetivos y recursos adecuados, pero lo más importante, con personas sensatas que actúen con conocimiento y sentido común, líderes no sólo políticos, sino también culturales, que no sucumban a intereses subterráneos y que lejos de esgrimir bravuconadas y pedantería, reflexionen con humildad y sensibilidad frente a una de las artes mayores como es la arquitectura, aunque esto suene a “pedir peros al olmo”.

PERFUME DE MUJER:

La tristeza de los burros

Ernesto Ferrini


En el umbral apareció una mujer de unos veinticinco años, de cuerpo menudo y pechos grandes (...) Vestía  jeans y un suéter negro de lana, más bien adherente, y en la mano llevaba un abrigo verde de franela, a la moda (...) Mientras la muchacha se dirigía a la sala, Sakic la miró por detrás. Pensó que estaba espectacular.

POESÍA: Responso para una marioneta (II)

Jim Ramos Ñañez

El titiritero ha huido
y ya ni vuelve;
sus falsos reinos prometidos
son estos espacios instantáneos
en donde nos movemos.
Allí representamos el drama o la comedia
Según se nos exija.

No estás en ninguna otra parte,

estás aquí, habitando tu propia muerta.

Yuyachkani llega a Huancayo

María Teresa Zúñiga Norero


Con motivo de las celebraciones por los 100 años del Colegio Andino, la Asociación Cultural Yuyachkani se presentará en Huancayo con la obra teatral “Los músicos ambulantes”, el día 21 de setiembre a las 7 pm, en el Teatro de la misma institución, ubicado en el Jr. Dos de Mayo 551.
Han pasado cien años desde que el Colegio Andino instaló sus cimientos en estas legendarias tierras. Desde entonces, la práctica teatral ha sido parte de su existencia, es por eso que la presencia de Yuyachkani en nuestra ciudad no es una coincidencia gratuita, por el contrario, es la síntesis histórica de una institución que apuesta por el arte teatral y una agrupación que representa lo más noble del teatro peruano.
Yuyachkani, grupo de gran trayectoria con más de cuarenta años de actividad, nos trae un hermoso espectáculo digno de ser visto por todos: “Los músicos ambulantes” es una obra considerada por la crítica especializada como un clásico peruano y latinoamericano. Sus hermosos personajes, representados por actores de talla internacional, conmueven los escenarios del mundo y ahora Huancayo se viste de gala para recibirlos. Teresa Ralli, Ana Correa, Débora Correa y Augusto Casafranca dan vida a cuatro personajes que representan nuestra identidad desde todas las latitudes.

Invitamos a toda la ciudadanía a participar de este magno evento cultural con el fin de congregar nuestra presencia y saludo a una institución que durante 100 años ha contribuido en la educación y formación de muchas generaciones y qué mejor manera que apreciando a “Los músicos ambulantes” del grupo Yuyachkani, símbolo del teatro nacional. Las entradas se ofrecen en el  mismo colegio (Jr. Guido 512 – Huancayo).

«Me gustaría mucho morirme escribiendo»


El héroe discreto (Alfaguara, 2013) es el primer título que Mario Vargas Llosa lanza después de haber obtenido el Premio Nobel de Literatura 2010, en el cual narra dos historias paralelas: el piurano Felícito Yanaqué es un pequeño empresario que es extorsionado constantemente. Por otro lado, Ismael Carrera es un exitoso hombre de negocios de Lima quien trama una ingeniosa venganza contra sus hijos que quisieron verlo muerto.
Estos personajes sirven para ambientar un Perú más próspero económicamente, pero donde las clases medias emergentes enfrentan problemas como la corrupción y la delincuencia: «Todo es fuente y consecuencia de la corrupción, que es el gran problema que enfrenta hoy en día América Latina», afirmó el Nobel durante la presentación de la novela.
«El desarrollo económico, casi en todos los casos, trae la presencia de mafias urbanas que aprovechan el crecimiento económico para construir empresas delictuosas que hacen chantaje, que ofrecen protección a cambio de cupos, que crean un orden paralelo».
Para Vargas Llosa, los héroes anónimos son el verdadero motor de un país, sin importar el aumento o disminución de las tasas económicas o el PBI, como Yanaqué quien, según el autor, se inspiró en un empresario de Trujillo, que realmente se negó a pagar la extorsión de una mafia local.

Durante la conferencia también le preguntaron sobre su futuro en la literatura y si el seguir escribiendo le ayuda a sobrellevar su edad (77 años): «Lo importante es vivir como si uno fuera inmortal, como si la muerte no existiera, como si no fuera a morir, aunque secretamente sepamos que eso no va a ocurrir». Y agregó: «Para mí, escribir es abolir ese aspecto tan negativo de la temporalidad. Me hace vivir intensamente, anula la preocupación (...) Me gustaría mucho morirme escribiendo».