domingo, 14 de octubre de 2012

LISTA OFICIAL DE TRABAJOS PARTICIPANTES EN EL I CONCURSO NACIONAL DE CUENTO "PREMIO SOLO 4"

Descárguela desde el siguiente enlace: http://issuu.com/luispuentedelavega/docs/lista_oficial_de_trabajos_participantes_i_concurso/

Solo 4, “439”, del 13 de OCTUBRE de 2012, año IX


LA CITA:

«Mi rol en la sociedad, o la de cualquier artista o poeta, es intentar expresar lo que sentimos todos. No decir a la gente cómo sentirse. No como un predicador, no como un líder, sino como un reflejo de todos nosotros.»

John Lennon

LO ÚLTIMO: Lista oficial de participantes en “Premio Solo 4”


En un extraordinario esfuerzo, en el marco de las celebraciones por los 50 años de fundación del diario Correo y nuestra próxima edición conmemorativa 444, convocamos al I Concurso Nacional de Cuento “Premio Solo 4”, que nos dio una grata sorpresa: 427 trabajos fueron recibidos hasta el momento, los cuales continúan en proceso de registro.
La lista completa de relatos participantes será publicada el día de mañana a las 9 am, para que pueda ser descargada desde nuestros sitios oficiales: en Facebook, “Suplemento Cultural Solo 4”; y en nuestro blog, www.suplementosolo4.blogspot.com. Gracias por la acogida.

Porque la justicia no puede ser barbarie


Jhony Carhuallanqui



El 10 de octubre se declaró como “El Día Mundial Contra la Pena de Muerte” con el propósito de concienciar a la población y comprometer a los gobiernos en  implementar medidas de sanción alternativas, que no transgredan el más elemental de los derechos: la vida. Este esfuerzo multisectorial —liderado por Amnistía Internacional—, está reunido en una Coalición de 64 organismos que desde hace10 años batallan por la eliminación de la pena capital.
El logro para 2012 es significativo. Hay una reducción progresiva de su uso, pues ya son 141 países los que la han eliminado o al menos, no la han ejecutado. Sólo 20 países la practican, siendo China el verdugo más implacable y el más reservado, pues no informa sobre el hecho al catalogarlo como “Secreto de Estado” y pese a haber eliminado 13 delitos como sus causales, es líder del vergonzoso ranking. Japón es un caso especial, pues su política humanitaria no contrasta con sus últimos siete ahorcamientos.
En Europa el único país que aún la práctica —a través del fusilamiento— es Bielorrusia. En Medio Oriente la situación es preocupante, pues se ha incrementado casi en un 50%: en Arabia Saudí la condena también se extiende a la homosexualidad, en Irán se admite para menores de edad, en Irak las “confesiones” forzadas las sustentan, y en Yemen procede contra los delincuentes juveniles.
En nuestro continente, EE.UU. es el país prominente en estas infaustas prácticas (ya van 30 muertos en lo que del año), y aunque también lo estipula Canadá, Cuba, Guyana y otros países del Caribe, no la han consumado en los últimos años.
Se calcula que existen 18,750 personas condenadas al patíbulo en el mundo, y aunque muchos están de acuerdo en su implementación, argumentando como principal razón la inefectividad del sistema penitenciario, asfixiado por la obesidad  normativa que no previene la violencia, debemos entender que la Dignidad Humana se logra no sólo exigiendo derechos, sino, respetándolos, así sean de individuos que cometan atrocidades. Un Tribunal no puede ser un instrumento de venganza.
Quizá la condena a la horca del dictador Iraquí Sadam Hussein y la cuestionada ejecución en Libia de Mudamar el-Gadafi no ameritan contrición alguna en muchos sectores, pero ha de ser el eje de los debates que, a fines de este año, debe entablarse en la ONU respecto a la pena de muerte como “derecho” del Estado (y a veces de la población).
Recordemos que en el ocaso de la II Guerra Mundial, Benito Mussolini fue fusilado, su cuerpo expuesto cabeza abajo para que pudieran escupirle, orinarle y golpearle. Actos mezquinos como estos no pueden nutrir la verdadera justicia que demanda la población.
Nuestra actual Constitución establece que “La pena de muerte sólo puede aplicarse por el delito de traición a la patria en caso de guerra, y el de terrorismo, conforme a las leyes y los tratados de los que el Perú es parte obligada” y, como firmantes de la Convención Americana sobre Derechos Humanos (CADH) o Pacto de San José, estamos obligados a no ampliarla a otros delitos, así como no aplicarla a menores de edad ni mayores de sesenta años.
Adicionalmente se firmó el Protocolo a la CADH Relativo a la Abolición de la Pena de Muerte que señala: Los Estados partes en el presente Protocolo no aplicarán en su territorio la pena de muerte a ninguna persona sometida a su jurisdicción”, pacto que el Perú aún no ha ratificado y que significaría su abolición absoluta, mientras tanto, es una facultad del Estado suspendida en el acto pero, reconocida en la legalidad.

IMPRESCINDIBLES / CINE:


Chico y Rita

Fernando Trueba

Chico y Rita viven una apasionada historia de amor en la Cuba de finales de los años cuarenta. Él es un joven pianista, enamorado del jazz, y Rita sueña con ser una gran cantante. Desde que se conocieron en un baile de salón en La Habana, el destino va uniéndolos y separándolos, como a los personajes de un bolero. Hermosa adaptación animada sobre la vida de Bebo Valdés que también sirve como excusa para hablar de Cuba, la patria querida, y sus cambios a mitad del siglo pasado.



Octubre

Daniel y Diego Vega

A propósito del mes, les presentamos “Octubre”, la cinta peruana que fue premiada en el Festival de Cannes con el Premio del Jurado. Clemente es un prestamista muy poco comunicativo. Clemente descubre una pequeña niña recién nacida, fruto de su relación con una prostituta que ha desaparecido. Así se encuentra con Sofía, su vecina soltera, que cada mes de octubre busca esperanza en Señor de los Milagros. Con la llegada de estas dos personas, y un visitante inesperado, Clemente llegará a cuestionar su existencia.



Mi nombre es John Lennon

Sam Taylor Wood (2009)

John Lennon nació en octubre, hace 72 años. Este “biopic” aborda su infancia y adolescencia hasta la formación de Los Beatles. Se desarrolla durante 1955, en Liverpool. Aún muy joven, debido a su familia disfuncional, se refugia en el excitante mundo del rock, donde encuentra su alma gemela en el adolescente Paul McCartney. Pocas veces se ha retratado con tanto cuidado, y sin aumentar las posiciones personales del realizador, la vida de un genio. Este es un retrato de uno de sus rostros pocas veces visto.


La balada de Danny Greene


Alvaro Sanchez Schwartz


     
Danny Greene se presentaba así mismo como: “Un hombre que no conoces todos los días”. Y ciertamente era así, su historia fue singular y trágica a la vez.
      Jonathan Hensleigh lleva a la pantalla su vida con una visión neutral,  alejándola de cualquier cintilla moralista suscribiéndose a lo meramente descriptivo. Si bien es cierto, los personajes pueden ser vistos en determinados momentos como estereotipados, pero no se debe olvidar que pertenecen a sub culturas con códigos propios, reconocibles y válidos entre ellos.
      “Maten al irlandés” (Kill the Irishman, 2011), sin alcanzar el nivel de la obra de Scorcesse o Coppola, nos muestra una visión más fresca de las viejas historias de gánster y mafiosos, aquellas que Paul Muni y James Cagney hicieron famosas en los años 30 del siglo pasado.
      Greene es un irlandés nacido en Cleveland, con profundas carencias afectivas durante su niñez, siempre en perenne lucha con otros muchachos de origen italiano. Ese será un punto de partida importante para los distintos enfrentamientos que tendría con ellos durante su vida adulta. El orgullo que siente por ser descendiente de guerreros irlandeses se verá tocado en diferentes puntos de la película.
      Como es conocido, el género sobre gánster nace paralelamente a los actos delictivos ocurridos en Nueva York, y otras ciudades de los Estados Unidos a inicios del siglo pasado. Los nombres y acciones de Lucky Luciano, Vito Genovesse o Al Capone serían llevadas a la pantalla, una y otra vez, a lo largo de más de 70 años de cine. Actores como los ya nombrados líneas arriba, así como Edward G, Robinson o Rod Steiger —haciendo de Al Capone en una interpretación impecable— darían forma y sustancia al género.
      En la cinta vemos la historia real de Danny Greene interpretada por Ray Stevenson, en ella conocemos las distintas facetas de su vida: el muchacho rebelde y conflictivo en su niñez hasta la adolescencia; el joven que va tomando un ascendiente carismático sobre otros irlandeses como él, hasta convertirse en un líder sindical asociado cada vez más al mundo del crimen, y más precisamente a la mafia italiana de Cleveland, tan sumisa y dependiente de la mafia italiana de Nueva York.
Lo que hizo de Greene una leyenda fue el desafío abierto que le hizo precisamente a esta organización delictiva, sin dejar de ser un mafioso. Su desafío lo hizo tanto dentro del mundo lumpen y soterrado del hampa, como a través de las cámaras de televisión, alcanzando notoriedad a nivel nacional pero, sobre todo, su leyenda se basó en el hecho de haber sobrevivido a ocho atentados contra su vida.
      La guerra de Danny Grenne en el verano de 1977 alcanzó niveles que nunca antes, ni después, de él conocería el mundo del crimen organizado en EEUU. Y si bien, esta película podría parecer a simple vista un canto a las acciones delictivas de estos personajes, también nos permite conocer los distintos caracteres y complejidades del ser humano. Las necesidades de sus protagonistas fundan a su vez sus metas; metas cuestionables por los medios que usan para alcanzarlas, haciendo de ellos personajes antisociales caracterizados por la ausencia emocional y la falta de culpa en sus actos.
Sus personalidades se van formando a través de los modelos vistos dentro de sus contextos sociales, pero las conductas también pueden estructurarse como actos aversivos a esos modelos, y esto lo vemos en el personaje interpretado por Val Kilmer, Joe Manditski, quien creció bajo las mismas circunstancias que Greene, pero a diferencia de éste, su camino se encuadra dentro del orden y la coherencia que esta conlleva.

Las actuaciones de Christoffer Walken y Vincent D'Onofrio en sus respectivos roles son rescatables, el segundo más que el primero, aunque la sola presencia de Walken en la cinta ya es bastante. Stevenson hace un Grenne convincente, casi mimético, lo que se puede apreciar al final del filme cuando aparece el verdadero Grenne en una entrevista que le hiciera la televisión de Cleveland.

Esta es otra característica de la película, hay una  inserción de escenas reales en ella. ”Maten al irlandés”, con su estilo biográfico produce interés y se ganaría con derecho propio un lugar dentro de una antología de cintas sobre la mafia. Es una película que atrapa, que va creciendo en intensidad y que gustará a muchos, y aún más, seguramente, a todos aquellos amantes de este género.

TODAVÍA NO PINTO CANAS / PRIMERA ENTREGA


Pintor por fastidiar a los pintores



Hace seis años, en octubre, Josué Sánchez ganó el primer lugar en el concurso de blogs para personas mayores de la agencia británica de información BBCMundo.com (en español), convocado como parte de las celebraciones por el Día Internacional de las Personas Mayores. La publicación tuvo una inusitada acogida mundial. Como un homenaje a la trayectoria de nuestro reconocido pintor y colaborador, a partir de esta semana, en el espacio de su columna “Desde el atelier”, publicaremos los cinco post de que constó el blog "Todavía no pinto canas" del que fue autor.

Josué Sánchez

Tengo 61 años, pero aún no pinto canas y me siento gloriosamente joven. La juventud es un estado mental, por eso aunque se me pusieron los pelos de punta cuando me enteré que escribiría un blog en BBC Mundo, terminé aceptando.
Claro que entonces apenas tenía una vaga noción de lo que era un blog —internet siempre me ha puesto nervioso—, pero después de encantarme leyendo a Khabiria —bloggera de Venezuela— y los consejos de Hernán Casciari, trataré de no defraudarlos.
Nada de esto fue idea mía. Se le ocurrió —¡cuándo no!— a Diana, mi esposa. Le fascina participar en concursos. Fue ella la que escribió a BBC Mundo con la esperanza de dejar de ser mi "secretaria ad honorem", como suele decir cuando utilizamos Internet.
Nunca me propuse ser pintor, en realidad soy escultor, pero hubiera querido ser músico. Ingresé al Conservatorio, pero mi madre enfermó gravemente y tuve que dejarlo para cuidarla. Para no perder el tiempo me matriculé en la Escuela de Bellas Artes de Huancayo, mi ciudad, en Perú. Siempre estuve ligado al arte.
De niño vivía cerca de una fábrica de tejas que nos daba una propina a los niños por trabajar en terracota pequeñas esculturas de toros, leones e iglesias que la fábrica obsequiaba a sus clientes. Era divertido hacerlas. Otra cosa que debió influir fue la afición de mi madre a urdir mantas. Yo le ayudaba a seleccionar los hilos. Así aprendí a armonizar los colores.
La Escuela de Bellas Artes sólo tenía 18 alumnos y únicamente dos estudiábamos escultura. Eso suponía una desventaja frente a las bromas de los estudiantes de pintura, pero nos dejaba dueños del taller de escultura y lejos de la pintura académica de corte occidental que se practicaba entonces.
Fue haciendo un estudio de una escultura pre-inca, que se me ocurrió ponerle color al dibujo. Cuando le mostré el resultado a mi maestro, el pintor Alejandro Gonzáles Trujillo, éste elogió mi trabajo y me alentó a seguir experimentando. Un año antes de terminar los estudios de arte hice mi primera exposición de pintura. Entonces me preguntaron por qué pintaba y, un poco en serio un poco en broma, contesté que era por fastidiar a los pintores.
Lograr un nombre no fue fácil. Aún recuerdo mi primera exposición importante en Lima. Ahí estaba yo, pretendiendo ignorar las acerbas críticas de los profesores de la Escuela de Bellas Artes de Lima invitados por la galerista, que encontraban insoportables mi pintura plana y el restallante colorido de mis cuadros, cuando para sorpresa de todos entró la famosísima escultora boliviana Marina Núñez del Prado, a quien yo sólo conocía por las fotos de los diarios. Mudo de la emoción, apenas atiné a balbucear unas palabras cuando ella acercándose me dijo en voz alta: "Felicitaciones, esta exposición en París hoy, sería un boom". Fue un momento glorioso. ¡Sí que fastidié a los pintores! Y fue el espaldarazo que necesitaba para consolidar un estilo basado en una estética andina.
Marina Núñez del Prado también me dijo entonces que sólo un arte con identidad puede ser universal. Cuando hablo con mis jóvenes alumnos de arte siempre les repito eso.

MICROCUENTO:


Sonámbulo

Sara Bravo Montenegro



Se levantó y se puso sus zapatos que estaban debajo de su cama. Encontró las llaves donde siempre las dejaba y abrió la puerta. Caminó por horas con rumbo ilimitado. Sintió una sensación lineal. Quizás era la mesa con la que a veces se tropezaba en la oscuridad. Movió un pie ligeramente, pero sintió un extraño vacío abismal y un viento suave. Se detuvo instintivamente antes de terminar de dar el paso. Al despertarse, vio volar unos gallinazos en círculo. El precipicio lo esperaba.

PERFUME DE MUJER


Un mundo feliz

Aldous Huxley



Emergieron de su sótano oscuro y escarlata, Lenina Crowne subió diecisiete pisos, torció a la derecha al salir del ascensor, avanzó por un largo pasillo y, abriendo la puerta del Vestuario Femenino, se zambulló en un caos ensordecedor de brazos, senos y ropa interior. Torrentes de agua caliente caían en un centenar de bañeras o salían borboteando de ellas por los desagües. Zumbando y silbando, ochenta máquinas para masaje —que funcionaban a base de vacío y vibración— amasaban simultáneamente (…) la carne firme y tostada por el sol de ochenta soberbios ejemplares femeninos que hablaban todos a voz en grito. Una máquina de Música Sintética susurraba un solo de súper corneta.

Mi primer “ebook”


Leonardo Mendoza Mesías



Una de las cosas más hermosas que recuerdo de mi niñez es mi primer libro. Un texto que como todo primarioso me empeñe en forrar, leer y guardar. Ya han pasado varios lustros y aún recuerdo, con la nitidez de aquel día, el color de las letras y dibujos que las acompañaban. Me siento un afortunado por la forma como leía mis libros, los visualizaba y sentía. Sin embargo, hoy al ver a tanto niño y joven ensimismado en sus “tablets”, Ipots, laptops y computadoras, me pregunto si tendrán o, mejor aún, disfrutarán de dicha experiencia: ¿la de tener un libro entre sus manos, cual fiel amigo siempre esperando enseñar sus conocimientos? Considero que no.
¿Por qué? Creo que la juventud de hoy, sobro todo la citadina, ya no es asidua visitante de anaqueles, estantes y librerías, ahora más bien los “bajan de internet”.
A partir de esta reflexión me pregunto: ¿los “ebooks” reemplazaran a los libros? Considero que no, aun cuando tienen muchas cosas en común. Una que los diferencia es que los textos de hoy ya no cuentan con hojas ni tinta. Estos libros virtuales no sufren el paso del tiempo, pues no se degradan ni amarillentan y, además, favorecen la supervivencia de muchos árboles.
Los libros de mi época eran impresos, los de ahora son virtuales y se pueden leer tanto como sus predecesores, donde quiera y cuando sea, salvo por un pequeño detalle: para leer los “ebooks” se debe contar con un procesador y su respectivo software. Por este detalle, y otros más, es que considero que un libro digital nunca podrá reemplazar al impreso, sin embargo, estas nuevas opciones son otras maneras de acceso al conocimiento y a la tecnología.
Hoy, comprar un libro digital o impreso es una opción que muchas veces está determinada por las necesidades del lector, pues en realidad, los contenidos se mantienen cambiando sólo el formato. Por eso mismo, estimado lector en algún momento de su vida no se sorprenda cuando por ahí encuentre la versión electrónica de “Mi Coquito” o “Mi pequeño Bruño” colgado en algún portal web.
Quizá para los nativos digitales y las generaciones de hoy, les será común, pero para otros que ya estamos sobre la base treinta o más será toda una sorpresa. Otra de las cosas que también nos dejará con cierta inquietud es que otrora se podía subrayar, oler, anotar en nuestros libros, mientras que en los de “ebooks”, no. Esto me indica que estas generaciones tienen o tendrán costumbres de trabajo cotidianas, diferentes a las que tuvimos, en su trabajo, estudios y diversión.
Así que estimado lector, solamente me queda invitarlo a actualizarse en estos nuevos avatares de la cotidianidad, sobre todo porque es una magnífica oportunidad de departir gratos momentos con las nuevas generaciones.

BREVIARIO: XVI Concurso Nacional de “T’anta Wawas”




El Museo Nacional de la Cultura Peruana, con la colaboración de la Municipalidad Distrital de Santiago de Surco, invitan al XVI Concurso Nacional de “T’anta Wawas”, con motivo de la celebración del Día de Todos los Santos y del Día de los Difuntos.
El concurso tiene la finalidad de difundir las “T’anta Wawas” como parte de las tradiciones gastronómicas y artísticas populares. La inscripción es gratuita y podrá realizarse en la Dirección Regional de Cultura Junín previo llenado de una ficha y entrega de una reseña.
Cada participante presentará su obra, un máximo de dos trabajos, el día 01 de noviembre, en  la Plaza Mayor de Santiago de Surco, a partir de las 8:00 am. Los premios serán dinero en efectivo.