sábado, 31 de julio de 2010

SOLO 4, EDICIÓN 323 DEL 24 DE JULIO DE 2010


Aniversario de Tarma
Este 26 de julio Tarma cumple 472 años. Con ese motivo, “Solo 4” ofrece una serie de artículos a nuestros lectores sobre esta provincia, como un homenaje que también nos sirve de excusa para abordar a Julio Ramón Ribeyro, quien pasó una temporada allí, y donde ambientó uno de sus mejores cuentos: “Silvio en El Rosedal”. Por todo ello y más, nuestros mejores deseos para los amigos de Tarma.






LA CITA:
Y regresaba a Tarma con el vacío en el alma, para deambular por sus tierras, aspirar una rosa, gustar un durazno, hojear viejos periódicos y aguardar ansioso que llegaran las sombras y acarrearan para siempre los escombros del día malgastado.
Julio Ramón Ribeyro, Silvio en el Rosedal

Pensamiento filosófico de Julio Ramón Ribeyro

(Edición Nº 323 del 24 de julio de 2010)

Teobaldo Samaniego Hurtado
Foto exclusiva: Julio Ramón Ribeyro en Tarma.
En mayo del 94 tuve la ocasión de conocer a Julio Ramón Ribeyro, hombre delgado, amable, de hablar cadencioso y preciso y lo comprometí para que ofreciera a la juventud tarmeña una conferencia en setiembre: “Tarma fuente de inspiración literaria”. Muy a nuestro pesar, su salud le jugó una mala pasada y frustró su presencia. En diciembre, de este mismo año, partió a la eternidad dejándonos una rica y variada herencia cultural.
Ribeyro estuvo emparentado con la familia Santa María, motivo por el que visitaba constantemente la ciudad de Tarma. Aprovechando su estancia vacacional en este pueblo, escribió dos cuentos, “Silvio en el Rosedal” y “Vaquita echada”, como resultado de la toma de lectura de los acontecimientos de la población y de la realidad paisajista de nuestro entorno. Por boca del narrador, nuestra ciudad es conocida en el mundo por los amantes de la buena lectura.

SER EN UNO
En esta circunstancia quiero hacer una confesión, siento una especial vocación por las obras de JRR, no soy un escritor, ni mucho menos, un especialista en literatura, soy un aficionado a la filosofía y quisiera compartir la preocupación por los temas de la vida y del mundo que encuentro en la narrativa del escritor.
Para empezar, diré que JRR y el narrador no son dos, quien leyó sus entrevistas, declaraciones hallará un mismo pensamiento que se ”amplía y ratifica”, por tanto existe una identidad entre Ribeyro y el narrador de su obra literaria. Destaco esta cualidad porque la coherencia y autenticidad son testimonios de autoridad y confianza. Ribeyro no ejerce la literatura como se ejerce la medicina o la abogacía, él vive con ella en unión libre, no para conquistar riquezas, poder o fama, pero por lo mismo, no es ajeno a la sociedad y a los problemas que esta tiene. Él ve la humillación, las frustraciones, la precariedad, el desconcierto, la desdicha, el sinsentido, y siente que es esa la verdadera sustancia del hombre, de los hombres, de sus vidas, de la vida. “Todo en él se conduce como si esta visión fuese el punto de partida para un viaje en redondo que vuelve siempre al mismo punto”.

CONOCIENDO LA REALIDAD
La realidad es otro de sus temas apasionantes. Él ve la realidad no como lo ven los científicos o cómo ven el común de las personas. La realidad admite múltiples lecturas. El escritor elige los signos que mejor puede leer. “La suya es la objetividad subjetiva”, pero ¿cómo es posible unir dos conceptos contradictorios? La objetividad es el reflejo de lo que se dice de un objeto con lo que el objeto es, en sí, esta concordancia entre el decir y el ser es la objetividad, y la subjetividad es la visión personal del entorno, lo que le parece que es y la subjetividades no se discute se admite por que el valor es individual. La ciencia para su constitución emplea conocimientos objetivos es decir que tengan el mismo valor para todos.
¿Qué pasa entonces con la afirmación del escritor? Repito, la objetividad subjetiva. “Su reflexión esconde un sentimiento; es una especulación, un juego de espejos: refleja (reflexiona) el objeto que lo refleja. Y es así como una óptica fría disimula una literatura sentimental”. Esta reflexión nos recuerda a Pablo Freire, que hablaba del educador-educando y del educando-educador, conocida como una relación dialéctica, donde el educador al cumplir su rol, también se educa convirtiéndose, al mismo tiempo, en un educando. Este mismo proceso lo vive el educando. Los conceptos contrapuestos se integran en el proceso.
Él se declara un escéptico radical. Para él las cosas son, fundamentalmente, como están, cuando se pregunta por las causas. Él dice que las causas explican accidentes, no esencias. Es más importante el cómo y el qué, y no le importa el por qué. Desde la perspectiva filosófica el escritor es un escéptico gnoseológico, calificación impropia pero ayudará a ingresar al insólito mundo creativo del narrador.


El buen salvaje

(Edición Nº 323 del 24 de julio de 2010)

Tarma en la pluma de Ribeyro

Sandro Bossio Suárez
Conozco la hacienda “La Florida”, de Tarma, aunque nunca estuve en ella. La conozco por Julio Ramón Ribeyro, quien la inmortalizó con el nombre de “El Rosedal” en su memorable “Silvio en el Rosedal”, hermoso cuento que sigue movilizando críticos y lectores en el mundo entero. Extenso y de argumento sucinto, cuenta el retiro andino que durante una década vive Silvio Lombardi, heredero a los cuarenta años de una hacienda tarmeña donde se confina por voluntad propia. Pasa sus días discurriendo por el rosedal de la hacienda, revisando periódicos viejos, asistiendo a las fiestas de los notables tarmeños (donde se critica el filisteísmo de la oligarquía serrana), envejeciendo sin ilusión. Una tarde, mientras escala un cerro, descubre una clave en el rosedal. De acuerdo a sus dilucidaciones, desde entonces se entrega a una labor de mejoras en la hacienda, pero también a largas horas de violín. Gracias a su labor, el renombre de la hacienda se extiende, y su virtuosismo alcanza el coronamiento cuando ofrece un inolvidable concierto de violín al lado del maestro Rómulo Cárdenas. Su rutina, un día, se ve interrumpida con la llegada de sus parientas italianas: una de ellas es Roxana Settembrini, su sobrina, hermosa quinceañera de quien Silvio se enamora. En la fiesta del final del cuento, Roxana es presentada a la sociedad y Silvio, al darse cuenta que carece de aptitud para participar en el festín de la vida, se retira con su violín a los altos de la casa para observar los festejos. El narrador remata: “Levantando su violín lo encajó contra su mandíbula y empezó a tocar para nadie, en medio del estruendo. Para nadie. Y tuvo la certeza de que nunca lo había hecho mejor”. En este desenlace inesperado, Silvio se resigna a la soledad, sin amargura, pero con una serenidad nacida de la tristeza y el fracaso, como tantos de los personajes de Ribeyro.
El cuento, claro, no se reduce a ese esbozo argumental: su estructura, aparentemente sencilla, va mucho más allá. John Penuel, de la Universidad de Nice-Sophia Antipolis, dice que ésta responde a una sinfonía (probablemente la misma de Bach que Silvio ejecuta al final): “El primer movimiento abarca la exposición, el anuncio de varios temas que luego serán ampliados, una ‘tour’ de la hacienda y la descripción de los primeros años de la estadía de Silvio en ella. El segundo movimiento corresponde a los esfuerzos de Silvio para encontrarle un sentido y una aplicación al misterioso mensaje en el rosedal que ahora observa detenidamente desde el mirador de una torre adjunta a la casa. Se acelera el ritmo en el último movimiento, arrojándole al lector hacia el final”.
Así, “Silvio en El Rosedal” se convierte en una obra maestra del cuento, donde Tarma y nuestras serranías, alcanzan dimensiones esplendorosas: “El Rosedal era la hacienda más codiciada del valle de Tarma, no por su extensión, pues apenas llegaba a las quinientas hectáreas, sino por su cercanía al pueblo, su feracidad y su hermosura”.

La fundación española de Tarma

(Edición Nº 323 del 24 de julio de 2010)

Reflexiones a propósito de un aniversario más

Carlos L. Orihuela Espinoza

Universidad de Alabama en Birmingham
Estados Unidos


El 26 de julio se celebra el 472 aniversario de la fundación española de Tarma. Los estudios históricos —aún con muchas imprecisiones— afirman que la ciudad de Tarma fue fundada en 1538 bajo el nombre de Santa Ana de la Ribera de Tarma. Al margen de la controversia sobre fechas y circunstancias, esta celebración, como todas las de su naturaleza, constituye una buena razón para reflexionar y renovar reconocimientos justicieros de una ciudad y una provincia de indudable prestigio e influencia regional y nacional, y a la que con mucha exactitud y trazo poético Antonio Raymondi bautizara como “La perla de los Andes”.
La creación oficial de Tarma por la corona española, en años del arribo colonialista europeo, resulta un hito cronológico interesante y oportuno, pero no un detalle crucial para delinear sus rasgos geográficos y culturales esenciales, ni menos para resumir sus roles sociales y culturales históricos. Los inicios de este importante centro urbano se remiten a épocas aún más remotas, a los albores mismos de la cultura andina. El topónimo “Tarma” se debería —entre otras hipótesis— a los términos “taramas” o “tarumas” con que se designa a una etnia regional integrada al proceso y grandeza del Tahuantinsuyo. Los numerosos restos arqueológicos, sobrevivientes a la corrosión de los siglos y la negligencia, en los alrededores de la provincia, son testimonios elocuentes de tiempos sin duda de admirable esfuerzo y desarrollo.
Enclavada en la tibieza de un valle secreto del lado oriental de la cordillera, a pocos minutos de la algarabía y densidad natural de la selva amazónica, Tarma se constituye en una urbe de antecedentes históricos notables, de un protagonismo regional prestigiado por la riqueza de su agricultura, la laboriosidad de sus habitantes, la hermosura espectacular de sus paisajes, la variedad y alegría de sus tradiciones, la generosidad de su clima, y la participación ejemplar de su gente, tanto a modo colectivo como individual, en hechos importantes de nuestro país.
La cercanía geográfica a los primeros contrafuertes andinos de la selva alta desarrolla un complejo microclima que hace posible el cultivo de múltiples especies de verduras (zanahorias, habas, coles, betarragas, coliflores, apios, nabos, lechugas, alcachofas, rabanitos, etc.) de calidad insuperable en los mercados de la metrópolis, maíces de desbordantes granos sólo comparables a los del valle del Cusco, sabrosas papas de invariabilidad genética codiciadas como buena semilla en las plantaciones de la costa y la sierra, frutas jugosas y desmesuradas como duraznos, tunas, manzanas, peras, tumbos, higos, capulíes, damascos y guindas, cuyo peso y abundancia suelen vencer a la flexibilidad de sus ramas, árboles de utilidad milenaria como la tara, el molle, el sauco y el kishuar. Es impensable el valle tarmeño sin la sinfonía de colores de la tierra, la solidez del cielo azul, los extensos mantos de flores silvestres, las muchedumbres de árboles, las chacras de verdes estridentes, y los trinos, zumbidos y lamentos de gorriones, picaflores, zorzales y tórtolas que celebran la erupción de luces del amanecer y la nitidez de las tardes soleadas, e interpretan el desangrado pentagrama de los crepúsculos.
La fertilidad y la abundancia de este valle se extienden igualmente a las artes y tradiciones populares. Los sentimientos y la imaginación de sus pobladores adquieren expresiones genuinas en la poesía y delicadeza melódica de la muliza. Este género musical enraizado a lo largo de la región central del Perú, desarrolla en Tarma una particular retórica y función comunal. Diríase que la muliza tarmeña condensa de manera fiel y vibrante la sicología, la conciencia histórica y el flujo imaginativo del poblador de una tierra abigarrada de sensaciones y asombros. La historiografía de las letras considera la valiosa contribución de intelectuales y poetas como José Gálvez Barrenechea, Eleodoro Vargas Vicuña y Adolfo Vienrich, entre otros, cuya obra ha irrumpido de manera desafiante y creativa en el cuerpo de la literatura y los estudios literarios del Perú moderno. Podemos decir lo mismo de artistas plásticos como José G. Otero, Enrique Orihuela y una generación de pintores muy reciente cuya calidad profesional representa ya un boom de la plástica nacional.
El proceso político y social del Perú ha contado también con la participación de tarmeños sin duda paradigmáticos en la defensa nacional y la construcción de una sociedad independiente e igualitaria. Requieren especial mención Juan Santos Atahualpa, Francisco de Paula Otero, Fray Pedro Marieluz, mártir de la independencia, Cecilio Limaymanta y el Batallón Tarma, heroicos combatientes que resistieron la abominable invasión chilena. De igual modo mencionemos el abultado número de políticos y estadistas que han regido la vida nacional, de los que, a modo de ejemplo, mencionamos a Pedro Pablo Bermúdez Ascarza y Manuel Arturo Odría Amoretti, que ocuparon la silla presidencial de la República en 1834 y 1948 respectivamente.
Sin duda, al referirnos a Tarma y su historia y realidad presente estamos hablando de una preciosa ciudad, de una bella parcela andina, de una comunidad ejemplar, que integra con méritos suficientes lo mejor de nuestros centros urbanos y de desarrollo del país. Que la conmemoración de su fundación española, además de mover a una reflexión sobre su devenir histórico, sea también una oportunidad para el regocijo de sus hijos, para el reencuentro y la renovación de proyectos. Muchas felicidades al pueblo de Tarma.

Pintura Tarma I, de Teodoro Núñez Ureta (Arequipa 1914-1988).

“Solo 4” inaugura blog

(Edición Nº 323 del 24 de julio de 2010)

A fin de estar conectados, y permitir que los contenidos del suplemento lleguen a nuestros lectores que viven en el resto del Perú y en el extranjero, habilitamos un blog, cuya dirección es http://suplementosolo4.blogspot.com, donde ya se están subiendo todos los textos de los suplementos correspondientes al nuevo “Solo 4”. Asimismo, estamos presentes en Facebook, y el correo electrónico para comentarios y colaboraciones (que no excedan los 2 mil caracteres incluyendo espacios) es solo4correo@gmail.com.

Perfume de mujer

(Edición Nº 323 del 24 de julio de 2010)

Ella dice que te concederá la libertad a condición de que la ames, que no la abandones, que te quedes con ella, que continúes satisfaciéndola, que sigas deseándola, se enrosca en torno a tu cuerpo, te besa frenéticamente, cubre tu cuerpo y tu rostro de saliva, no forma más que una bola contigo, ha ganado ella, tú no puedes resistir más, vuelves a sucumbir al deseo carnal, no puedes sustraerte a él.

Gao Xingjian, La montaña del alma

Que la magia del arte nos inspire

(Edición Nº 323 del 24 de julio de 2010)

Arturo Neri

Entrados ya en una nueva era los artistas se preguntan sobre el rol del arte en la era de los silfos; muchos viajan en busca de la modernidad, otros son inspirados por los descubrimientos de la ciencia y la tecnología, y hay también de aquellos que no abandonan la tradición no defendiéndola sino expresándola en cada movimiento, en cada sonido, en cada color, en cada gesto, en cada palabra, en cada expresión y en cada imagen.
El genio creador de los abuelos no se ha perdido, no ha sido desalojado de nuestros genes, no ha sido cubierto con el velo del olvido, está allí, no en el museo ni en los proyectos culturales sino en el presente, enterrado pero vivo, danzando al sol con movimientos sincronizados, recreando sus colores y sus sabores en armonía con la memoria colectiva, en compás de espera atento al dar de batuta para iniciar el movimiento esperado.
Muchas manifestaciones artísticas están contribuyendo a la reconstrucción de aquella identidad oscurecida hace varias centenas de años, están buscando el cause entre la tradición y la modernidad, entre el espanto y la ternura, entre lo humano y lo divino; están absorbiendo de las raíces esa energía milenaria esencial e invisible que se hará visible cuando el sol sin ocaso derrame sus primeras luces perpetuando la presencia de la causa primera, de la belleza inmutable; estos movimientos culturales, orquestas sinfónicas, compañías de teatro y otros no están haciendo otra cosa que hollar el camino en aras de ir perfilando una identidad genuina y tolerante acorde a esta era.

El ocaso del vaquero

(Edición Nº 323 del 24 de julio de 2010)

Clint Eastwood

Jorge Jaime Valdez.
Clint Eastwood (San Francisco, 1930) acaba de cumplir 80 años y se encuentra en la cima de su carrera. Pocos realizadores han logrado el dominio de la técnica y de la sapiencia que exige contar historias profundas en la pantalla grande. Como es difícil resumir tantas décadas de buen cine en pocas líneas, nos limitaremos a mencionar algunas películas entrañables de su filmografía. La tarea es difícil, pero ahí vamos:

Golpes del destino (2005) es la primera gran película dirigida por Eastwood y acaso fue la mejor de ese año. Es un “biopic” sobre uno de los mayores saxofonistas de todos los tiempos: Charlie Parker, “Bird” para sus amigos y melómanos de todo el mundo. La cinta es cadenciosa y bella, triste y sombría, conmovedora y autodestructiva como la propia vida de ese enorme músico heroinómano pero genial. Cortázar escribió “El perseguidor” para contarnos su historia; nos preguntamos si Eastwood lo leyó o si la inspiración le vino de su incomparable y tormentosa música.
Los imperdonables (Unforgiven, 1992) es probablemente uno de los mejores western de la historia del cine. Es una película atípica que narra el ocaso de unos vaqueros que ya no son lo que fueron, y cuan difícil les resulta empuñar un arma y matar a un hombre. Muestra cómo la violencia fundó toda una nación, con una visión desencantada, sórdida y oscura del viejo oeste.
Un mundo perfecto (1993) es quizás su mejor cinta. Cuenta la historia de un forajido y un niño sin padre que viajan por el oeste huyendo de la justicia: son dos vagabundos, dos amigos, dos almas sensibles que se juntan en una aventura hacia ninguna parte. Es notable la actuación de Kevin Costner y entrañable su dupla con el niño. Esta es la obra maestra del viejo Clint.
Los puentes de Madison (1995) es el gran melodrama de los noventa y una de las historias de amor más sensibles que haya dado el cine norteamericano. Es el encuentro de dos personas mayores que se aman con locura, aunque no les queda mucho tiempo, sólo el recuerdo de lo que pudo haber sido la felicidad y no fue, solamente el amor convencional y el recuerdo del ser amado.
Río Místico (2003) en apariencia es un drama policial, pero es más que eso. Es oscura, triste y desencantada. Habla de la inocencia perdida por el abuso infantil y del dolor de un muerto en vida. Paradójicamente, el verdugo se convierte en redentor; en esta otra obra maestra que le dio el Oscar a Sean Penn y a Tim Robbins en los roles de sus vidas.
Golpes del destino (2005) los vínculos filiales otra vez: un viejo entrenador de box y una chica que no tiene a nadie en el mundo se juntan para enfrentarse a la vida a puño limpio. La que parece ser una película clásica de box se convierten en melodrama desgarrador; habla de perdedores y de solitarios, de sacrificios y de redención, habitual en el cine de Eastwood.
La lista podría seguir, pero el espacio es corto. Sólo nos queda maravillarnos por las películas de este maestro del cine, que además de actuar, dirigir y musicalizar sus cintas, hace un juego mágico y misterioso de luces y sombras que reinventa la vida en rollos de celuloide.

Breviario

(Edición Nº 323 del 24 de julio de 2010)

El próximo sábado:
Ciclo de entrevistas: Susana Baca

Este sábado, siguiendo con la serie de entrevistas a artistas de talla internacional por el escritor y periodista Sandro Bossio, recogidas en exclusiva para “Solo 4”, publicaremos la realizada a la cantante, compositora e investigadora de música afroperuana Susana Baca.
Asimismo, también se publicará entrevistas a cantautores como León Greco y Silvio Rodríguez; y escritores como Gustavo Bolívar y Jorge Franco.




Se presentará en la II Felizh
Pedro Granados publica “Vallejo sin fronteras”

El conocido poeta y ensayista Pedro Granados acaba de publicar “Vallejo sin fronteras” (Arcadia/ Espacio Cultura, 2010), libro que reúne una serie de ensayos sobre la obra lírica de César Vallejo. Entre los textos presentes se cuentan “Mujer, fatal, compañera y madre en la poesía de César Vallejo”; “El Taller Literario César Vallejo en la República Dominicana”; “Trilce: muletilla del canto y adorno del baile de jarana”; “El diálogo Borges-Vallejo: un silencio elocuente”; “Compromiso y magia en la poesía de agitación política: El caso de Roque Dalton (y César Vallejo)” y “Trilce y Georgette”. Cabe señalar que Pedro Granados es uno de los mayores especialistas del país en la obra de César Vallejo.




Cuentos de Alberto Chavarría
“La guerra de la cruz del sur”

El escritor Alberto Chavarría Muñoz (Tayacaja, 1959) publicó “La guerra de la cruz del sur”, breve libro que contiene cuatro cuentos de los que, además del que le da título (ambientado en la sierra peruana durante la Guerra del Pacífico, con un soldado chileno y una india peruana como protagonistas), se cuentan “Los valientes de Maquiavelo”, “1 de julio de 1959. Historia de un acontecimiento extraterrestre en Huaytapallana” y “El hombre de la mirada furtiva”. Este libro ha sido publicado bajo el auspicio del grupo de proyección social “Educadores del nuevo milenio”, y está prologado por el escritor Félix Huamán Cabrera.





Encuentro en Tingo María:
Literatura infantil y juvenil

Por primera vez en la selva se llevará a cabo del 7 al 9 de octubre de 2010 el XXIX encuentro nacional “Arnaldo Panaifo Teixeira” y IV internacional “Eliseo Diego” de la asociación peruana de literatura infantil y juvenil. Con el objetivo de lograr el ideal de formación del niño peruano, se realizarán conferencias magistrales con invitados especiales, ponencias, talleres, presentaciones de libros, recitales al aire libre, cuenta cuentos, y la Feria del Libro Aplijista, donde los estudiantes y maestros encontrarán material nuevo para su trabajo docente. Las inscripciones están abiertas hasta el 20 de setiembre, y podrán hacerse a los teléfonos (062) 562504939 y 054 202946.

Zona Franca

(Edición Nº 323 del 24 de julio de 2010)

Presentación de libro
Juan Pablo Meneses
“Hotel España: Un nuevo descubrimiento de América Latina”
Presentan: Juan Pablo Meneses, Wilber Huacasi y Juan Carlos Suárez
Jueves 28 de julio desde las 10 am
Lugar: Auditorio de la Universidad Continental Calle Real 125, Huancayo


Teatro musical
Mentiras
El musical con tus canciones de los 80
Lugar: Auditorio Nuestra Señora del Valle
Fecha: sábado 31 de julio
Hora: 7:30 PM


Cine Foro
Ciclo: Cine peruano del siglo XXI
Película: "Polvo enamorado" de Luis Barrios
Forista: José Pacheco
Lunes 26 de julio a las 7pm
Centro Cultural Continental, Auditorio de la Sede Central, calle Real 125, Huancayo.
INGRESO LIBRE


II encuentro de poetas
Llamados por un mismo silencio
Participan poetas de la región
Martes 27 de julio a las 6:30 PM
Lugar: “Café Blanco”, Av. Huancavelica 831
INGRESO LIBRE

viernes, 30 de julio de 2010

EDICIÓN DE ANIVERSARIO Nº 322 DEL 17 DE JULIO DE 2010


Van los primeros siete

El tiempo ha pasado, y ya van siete años desde que se imprimió el primer ejemplar del suplemento cultural “Solo 4”.
Desde entonces muchos autores han desfilado por las páginas del suplemento, con contenidos de toda índole: desde textos periodísticos (entrevistas, croniquillas) hasta artículos de fondo y ensayos, sin contar las noticias que nos mantenían al día del acontecer cultural de la región, pues “Solo 4” es un referente y una tribuna abierta para todo el público.
Después de tanto tiempo, y con la misma consigna de siempre, continuaremos en esta labor, pues usted, amigo lector, nos ha convertido en el primer espacio cultural de Junín.

FOTOS: Portadas de la primera y última edición.



LA CITA:
Pero no es de política ni de cultura ni aun de política cultural que hablo sino del amor y de sus formas y de las formas de mi amor, aun de las formas vacías de amor.
Guillermo Cabrera Infante, La Habana para un infante difunto

"Solo 4": Edición de aniversario

(Edición de aniversario Nº 322 del 17 de julio de 2010)

El capitán y “Solo 4”

Escribe: Héctor Meza Parra
El profesor César Fabián ha convertido sus clases de Comunicación en un basural de papeles. Sus alumnos no le dicen profesor, le dicen capitán Fabián. Ellos saben que los días lunes a primera hora el aula será un carnaval, por eso aman los lunes. Habrá música y libertad. Saben ya lo que deben cargar: tijeras, reglas, gomas, resaltadores, diccionarios y cartulinas. Listos para enfrentar el combate. El capitán, al entrar al salón los ve enhiestos y sin respirar, prestos a recibir órdenes. Ellos están ahí, tranquilos pero con los pies hechos un resorte. Los periódicos están sobre las carpetas; ellos ensalivan mirando las tijeras y las presas tendidas. Esperan una frase, la frase de su capi: “Operación Plan Lector”, dos… ¡treees!.. Empiecen. Los soldados saben lo que tienen que hacer, por eso se avientan y descuartizan sin piedad todo cuanto pueden del suplemento. Los que no han traído, quitan y los que sí, revenden; los otros preguntan y repreguntan ¿profe puedo sacar una fotocopia? No soy profe, soy capitán, anda nomás hijo, saca mil si quieres. Al volver, se quitan el naipe de hojas, otros se desquitan con el puño. El salón es una feria de papeles volando sobre el cielo de carrizo. Uno de ellos se acerca al capitán y le pregunta si ha seleccionado bien ese artículo de Nicolás Matayoshi, el capitán dice que sí. Otro dice, ¡está bueno! Los otros siguen cortando y pegando pedazo a pedazo los sinlogismos. Al rato pasan a los poemas. A la media hora llegan a esa médula oprobiosa que es “Perfume de mujer”. Cómo se deleitan esos zánganos con aquellas frases eróticas: pelvis, caderas, senos… Terminada esa parte, el grupo se dispone a enfrentarse a lo más villano: la columna del impío Sandro Bossio Suárez. Allí empieza el festín. Los alumnos leen, analizan, aprueban y desaprueban esos breves ensayos. Otros se resisten a leer. Entonces le sale el genio al capi y formándolos nuevamente les recuerda sobre la exterminación judía. Ellos hacen un silencio pavoroso y solamente lo maldicen de reojo. El capi en el fondo los quiere y no les dice nada: Bueno, muchachos, ahora saquen el diccionario porque vamos a analizar al salvaje de Sandro, ¿profesor vamos a subrayar las palabras que no entendemos como el otro día? Y el capi, no solamente a subrayar sino a devorar y luego a crear un texto con esas siete palabras. “Siete plagas será”, contesta alguien. Pero por ahora al capi no le interesa. Está sordo.
Luego de dos horas de comilona papeluchera, la jornada termina. Esos artículos del suplemento ya están pegados en el fólder de trabajo. Se ha disfrutado del carnaval y la ciudad ha quedado devastada. El capitán también está agotado pero ama su basural.
Toca el timbre, es cambio de hora, “ohhh”, se escucha un rumor en las carpetas. Ingresa el profesor de matemática con la cara torcida, saca el registro y manda al patíbulo a cuatro soldados. Luego llama al auxiliar. A la media hora vuelve con un encargo para el capitán:
—La señora directora quiere conversar con usted. Dice que lleve la copia de su contrato.
El capitán sabe que no debe bajar la cabeza. Y también sabe lo que le espera.

Chorrillos, 14 de julio de 2010

“Solo 4” y la cultura

(Edición de aniversario Nº 322 del 17 de julio de 2010)

Tenemos fe

José Oregón Morales

Hay momentos en que los trabajadores de la cultura de Junín, Huancavelica, Ayacucho, Cerro de Pasco, Huánuco y la Selva Central también le cantamos al Quijote derrotado de León Felipe: “Hazme un sitio en tu montura / Y llévame a tu lugar / Que yo también / Voy cargado de amargura / Y no puedo batallar”.
Huancayo, pueblo fenicio. Políticos de turno, más bien diríamos saqueadores de turno, sin norte cultural; casas de la cultura pobladas de burócratas neófitos vegetando en los sillones, sin iniciativa, sin creatividad; pertinaces en recuperar los soles que invirtieron en las campañas políticas. El gran proyecto de “El Palacio del Arte y la Cultura” pudriéndose en algún rincón de la municipalidad huanca; y los espacios para su construcción usurpados al pueblo por un grupillo de mercachifles sátrapas del “mercado artesanal”.
Frente a este panorama, los escritores, poetas, artistas plásticos, artesanos genuinos, folkloristas, desde nuestros pueblos y hogares, trabajamos, creamos, rescatamos ganando espacios a la mezquindad como aquella de los regidores del municipio huanca que, cómodamente apoltronados en sus oficinas —que justamente se han construido donde debería erigirse “El Palacio del Arte y la Cultura”— parieron para la memoria de las generaciones futuras su negativa y desautorización a la realización de la Feria del Libro 2009. Gran parto asnal.
Desde este bastión llamado “Solo 4”, nos esperan muchas jornadas y la victoria finalmente será nuestra porque construimos un pueblo con memoria histórica, con identidad; rescatando su patrimonio vivo, y tenemos fe que nuestros futuros literatos, artistas plásticos, artesanos, poetas y narradores tendrán los palacios y los espacios dignos de un pueblo que hace tiempo se merece.

El nuevo “Solo 4”

(Edición de aniversario Nº 322 del 17 de julio de 2010)

Con mejoras sustanciales

“Solo 4”, el suplemento cultural del diario Correo de Huancayo, nació como un medio que dé cabida a la labor artística e intelectual de la región. A lo largo de siete años ha mantenido esa línea, y en este nuevo se le dará un valor agregado: la mejora de algunos puntos débiles que se venían arrastrando desde tiempo atrás y, desde luego, la consolidación del suplemento.
Creemos que una publicación cultural debe ser lo más universal posible. Por ello, es preciso dar cabida a la cultura local, poniéndola en valor, dándole una tribuna donde desarrollarse y desenvolverse. Una limitación que deseamos superar es el centralismo excesivo: esa tendencia a encerrarse en ghettos culturales; pues las artes, la literatura y la cultura están en constante renovación, absorbiendo influencias externas y aportando así con la transformación de la cultura global. Por ello, “Solo 4” seguirá siendo una plataforma cultural para los intelectuales y artistas de la región, impulsaremos además a los nuevos autores; y enriqueceremos los contenidos con textos provenientes del resto del país y del extranjero.
Visualmente, el suplemento presentaba algunas limitaciones. Por eso, en los últimos cinco números ha ido sufriendo cambios graduales para hacerlo más ágil y presentable. Por otro lado, como publicación cultural “Solo 4” cumple una función educadora. Sabedores de ello, tomamos muy en serio además de los contenidos, el manejo lingüístico e idiomático de los textos que publicamos. Pasarán por eso por una minuciosa corrección de estilo que elimine —al menos en su mayor parte— errores y faltas.
“Solo 4” es un suplemento de todos, que se hace gracias a la amable colaboración de cientos de personas que comparten desinteresadamente con nuestros lectores sus textos y trabajos. Ese es el fundamento de esta publicación. Por eso mismo, nuestras puertas estarán siempre abiertas para la comunidad.

EL COMITÉ EDITOR

Vox Pópuli

(Edición de aniversario Nº 322 del 17 de julio de 2010)


La presencia de “Solo 4”, como difusor del quehacer cultural de Junín, es altamente saludable y fructífera, pues semanalmente reúne en sus páginas a voces de reconocido prestigio y trayectoria, que representan a esta parte central del país, que otros medios de comunicación soslayan y marginan.
En esta oportunidad hago llegar mis saludos al Director de “Correo” y a ese equipo de “Solo 4” quienes, llenos de porfía y sensibilidad, cada semana nos tocan las puertas del espíritu para que los moradores del Valle gocemos de una muestra estética, ágil y variada, trascendental y valiosa.


Gerardo Garcíarosales
Poeta



Actualmente, gracias a los medios de comunicación social, tenemos una percepción del mundo que no corresponde a los modelos de conducta que necesitamos tanto para los jóvenes, pues cada día somos testigos o nos informamos del incremento de la delincuencia, la injusticia, la corrupción, la violencia, que no contribuye en nada para mejorar la condición humana y lograr una sociedad renovada, más justa y solidaria, menos consumista y alienada.
Desde este punto de vista, agradecemos y felicitamos al Director y editor del Suplemento Cultural “Solo 4”, que desde el 2003 es una puerta abierta que contribuye al desarrollo cultural de nuestra, es una panacea cultural que ávidamente se espera cada sábado.

Amanda Flores Hilario
Docente y lectora




Solo 4”, en sus 7 cabalísticos años, se ha convertido en bibliografía obligada de la Historia de la Literatura Regional. Alienta y motiva las nacientes vocaciones literarias. Aquí tienen voz y presencia los veteranos y novísimos poetas. Incide con fiel terquedad en hacer conocer a nuestros escritores en el concierto de la literatura peruana, cumpliendo a cabalidad el viejo postulado de “Correo”: “parte de tu aldea y serás universal”, como reclamaba Arguedas. Saludamos con especial beneplácito este nuevo aniversario y deseamos, en verdad, larga vida a “Solo 4”.


Apolinario Mayta Inga
Crítico literario



El suplemento cultural “Solo 4” viene revalorando a todos los escritores de la región, y viene sacando artículos inéditos, volcando así los conocimientos para los alumnos de estudios básicos y de nivel universitario, especialmente para las facultades de Antropología, Sociología, Pedagogía y Humanidades en Huancayo; así también como para los que llegan desde otras universidades de todo el país. Por eso, guardo toda la colección, desde el primero hasta el último de los números, pues me sirven en mi investigación y también para remitirlos al extranjero como una muestra de la cultura local.

Juan Cangahuala Malpica
Historiador





El Suplemento “Solo 4” es un medio importante y didáctico de difusión cultural en la región centro. Cada sábado nos informa y entretiene con una variedad selecta de publicaciones. Cabe resaltar que estos últimos años ha demostrado ser un canal eficiente de la prensa local para fomentar en la población, un interés por aprender y valorar la producción de las diversas manifestaciones artísticas e intelectuales del ámbito regional, nacional e internacional, motivo por el cual, cuenta con una buena cantidad de asiduos lectores de diferentes edades y estratos sociales.

Patricia Tauma Romero
Presidenta del Movimiento Literario Dosamarus






Tener revistas culturales como “Solo 4”, aun cuando haya altibajos, siempre es aleccionador. Ello porque nos permite conocer la producción literaria y cultural. Además, resultaría una acción de tosca estulticia que un medio importante como “Correo” no diese a conocer los aspectos importantes de la espiritualidad huancaína.
La importancia de esta revista, aún pequeña para la magnitud de la ciudad, está en que plantea, sin decirlo, la necesidad urgente de políticas culturales, en hacer ver a sus intelectuales y creadores culturales en cierta marginalidad, a pesar de estar creando constantemente. Un aporte recuperatorio, de la cultura urbana, es la existencia de “Solo 4”. Por ello, congratulaciones.

Alberto Chavarría Muñoz
Escritor





Con 7 años de publicación ininterrumpida, “Solo 4” es la lectura obligada del sábado por la mañana, un documento insustituible para los intelectuales y amantes de la cultura, testigo privilegiado del quehacer cultural de la región y, sin duda, su más valioso medio periodístico de difusión.

Diana Casas
Directora del Centro Cultural del ICONA





Pionero en la difusión de la cultura, el Suplemento “Solo 4” constituye para Huancayo su principal referente periodístico en este campo, un espacio abierto a las diversas expresiones del arte, la literatura y la reflexión crítica; su contribución al desarrollo cultural de la región es muy grande.

Josué Sánchez
Pintor

Perfume de mujer

(Edición de aniversario Nº 322 del 17 de julio de 2010)

No sólo la desvestía íntegramente, sino que, pareciéndole poco todavía eso, la palpaba y jugaba con todas las partes de su cuerpo, de curvas amplias y recovecos profundos donde se cruzaban la sombra y la luz en un juego misterioso. Doña Flor intentaba cubrirse, pero él le arrancaba la sábana entre risas y dejaba al aire los duros senos, las hermosas nalgas, el pubis casi sin vello. La tomaba como a un juguete; un juguete o un cerrado capullo de rosa que él hacía abrirse en cada noche de placer.

Jorge Amado, Doña Flor y sus dos maridos

Entrevista exclusiva: Fito Páez

(Edición de aniversario Nº 322 del 17 de julio de 2010)
Colección de entrevistas
Sandro Bossio Suárez recogió en Colombia, durante su participación en el III Congreso de Cultura Iberoamericana, entrevistas a varios cantantes, músicos, escritores y actores culturales de Latinoamérica, como Silvio Rodríguez, León Gieco, Susana Baca, Jorge Franco, Gustavo Bolívar, entre otros. En esta edición, empezamos con la anunciada entrevista de Fito Páez.

Fito en technicolor
Su asistente acciona el encendedor y una llamita amarilla se empina hacia el cigarrillo que pende de su rostro flaco y barbudo. Sólo después, con un suspiro de alivio, Fito Páez se arrellana en el sillón presto a responder nuestras preguntas. Y aquí vamos.
Sandro Bossio Suárez

No sólo eres cantante, sino, sobre todo, compositor. ¿Todavía crees en la musa inspiradora de la que se hablaba en el Medioevo?
No, a estas alturas, yendo y viniendo, de país en país, no tengo un método, ni una lógica. Trabajas y trabajas y en el momento menos pensado te das cuenta que tenés un disco. Y hay que parirlo.

¿Técnicamente, cuál es el proceso de creación de una canción?
Lo primero que hago es crearlo en silencio, solo, pero luego hay que conversarlo, mostrarlo. No hay que tener el narcisismo tan alto como para pensar que todo lo que hacés le va a interesar y gustar a la gente. Si pasan esa prueba, entonces vienen los lanzamientos en público. Personalmente, trabajo muy rápido: en veinte días hice el ochenta por ciento de mis discos. “La hora del destino” tuvo sus inicios como balada onda Lebón, porque sólo lo puede tocar. Pero llegó Coki Debernardi para cambiarle la onda, sólo con el ritmo de la batería. “La casa de las estrellas” es un remake de “El amor después del amor”, pero después tuvimos que asignarle una onda soul. Hay algo a lo que yo le llamo destino.

En ese proceso de creación, musicalmente, ¿piensas en cómo esas canciones van a sonar en vivo?
No. Cuando compongo no imagino cantándolo en público. Cuando me pongo a trabajar, trato de darle forma a eso que está ahí, que no sé de qué se trata hasta que después de trabajarlo un poco le empiezo a descubrir una forma. Para mí hacer una canción es una actividad artesanal. No me impongo horarios, no me dejo presionar, trato de trabajar con mucha independencia. Creo que alguna vez dije que la música es una novia cara que te pide mucho y también te da mucho.

Respóndeme con honestidad, ¿eres un clásico del rock argentino?
Represento el movimiento rockero local que se mueve bajo el influjo del tándem Nebbia-Spinetta-García. Yo solo represento, acompaño, escolto. No me puedo sentir protagonista del rock argentino porque, al lado de estos hombres, yo no soy nada.

¿Cómo que nada? También eres cineasta…
Si así lo querés llamar. Tuve que pagar mi derecho de piso. Es increíble. Si sos músico, dedicate a la música y no al cine, porque si insistes y lo hacés tienes que pagar. Y lo hice.

¿Cuántas películas has dirigido?
Bueno, algunas. “La balada de Donna Helena” es un mediometraje de 1993. En el 2001 hice “Vidas privadas” y en el 2007 “¿De quién es el portaligas?”. Ahora estoy metido en otro proyecto. También escribo los guiones.

¿Y qué te gusta más: la música o el cine?
Ambos. Cuando hago música, hago cine; y cuando hago cine siempre hago música, claro está (risas).

De alguna manera eres también un escritor. ¿Qué opinas de la literatura?
Que es un ente social tan importante como la música. Me gusta mucho la literatura. Alguna vez quise ser escritor, dedicarme a eso. El miedo siempre me apartó. Pero bueno, ahora lo disfruto. Me gusta mucho la literatura disidente.

¿Nos puedes dar tres nombres?
No, sería mezquino. Pero creo que la literatura argentina es muy buena, muy grande, como la música. Y no lo digo porque sea argentino. Quizás Arlt, Borges, Aira. No lo sé.

Alguna vez escuché decir que eres un cantante político. ¿Lo consideras?
No propiamente. Hago política, como todos, me preocupo por la política, claro, pero no tengo una intención política con mis canciones. Que mis canciones golpeen a los políticos y a sus imbéciles formas de gobernar, es otra cosa. A mí me preocupa América Latina, ver que en treinta años de democracia esto no arranca. Porque ahora ya no estoy solo, también están mis hijos y digo con susto: “puta, no, no arranca”. No entiendo por qué. Debemos aprender de nuestros errores, de nuestras crisis, no es difícil sentarnos a la mesa a negociar. Falta mucha grandeza en los políticos. Por eso no hago música para ellos.

Remembranzas

(Edición de aniversario Nº 322 del 17 de julio de 2010)

Hoy por hoy, “Solo 4” merece ser más que un suplemento, “Solo 4” merece estar a la vanguardia de la era digital. Con 7 años de largo recorrido cultural ahora se hace necesario tenerlo impregnado en la web para quienes no estamos en nuestra querida Incontrastable, para quienes deseamos difundir este suplemento por todo el orbe. Un blog quizá, tal vez una página web que resalte la labor cultural del centro del país que realiza el diario “Correo”, así no sólo nos mantendremos informados de las noticias del día. Saludos y más éxitos al director Héctor Mayhuire y al nuevo editor Juan Carlos Suárez.

Fernando Rojas Vargas
Ex editor Suplemento “Solo 4”


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Mi experiencia como editor de "Solo 4", por fortuna, no ha podido convertirme en ese malicioso despedazador de textos fabulosos, sino en un asombrado y precoz remendador de pedazos de cultura popular; no me ha enseñado a promover individuales adicciones a glorias precarias, sino a perfilar una nutrida entidad animada por amor a la cultura huanca. Toda esa labor estuvo siempre orientada a promover políticas culturales que involucren a la gente en la búsqueda de la felicidad, aunque esa felicidad, cada vez más, tenga pellejo de ficción.

Edvan Ríos
Ex editor Suplemento “Solo 4”

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El pensador mexicano Alfonso Reyes decía que “el informar sobre lo obvio es superstición histórica o vicio de coleccionista entre los modernos”; he aquí el gran reto que nos autoimpusimos cuando por entonces editábamos “Solo 4”: no repetir lo que todos los medios decían, sino por el contrario sumergirnos en la cultura misma, buscando en ella la diversidad temática, sin hacer una especie de arqueología literaria o demostración de vanidades, porque la nuestra cultura aún está viva, y reclama no ser más postergada.

Jaime Bravo
Ex editor Suplemento “Solo 4”

Breviario

(Edición Nº 322 del 17 de julio de 2010)

Fallece Miguel Suárez Osorio

El abogado y periodista Miguel Suárez Osorio falleció a los 82 años víctima del mal de Alzheimer.
Nacido en La Oroya, el 10 de mayo de 1928, fundó varios semanarios y revistas en La Oroya, Tarma y Huancayo, y es coautor del famoso libro “Historia del Periodismo en Junín”, junto con Antonio Cisneros Reaño; además escribió otros libros como “Historia del Colegio Nacional Santa Isabel”, “Recopilación de Autores de Cerro de Pasco”, “Huancainismos” y “Comentarios a Ricardo Palma”. Con su desaparición, Huancayo pierde a un notable propulsor del periodismo y la cultura local.

Zona Franca

(Edición Nº 322 del 17 de julio de 2010)

“Romance del papalote que quería llegar a la luna”
Teatro en Huancayo
Del cubano René Fernández Santana
ORGANIZA: FP Producciones
Todos los sábados y domingos hasta el 01 de agosto
HORA: 4:30 PM
LUGAR: “La Casa de la Juventud y la Cultura” de Huancayo

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Ciclo de documentales
Mundo sin guerras y sin violencia
Sábado 17: "Paz creciente o destruccion creciente"
Sábado 24: "Bagdad rap"
Sábado 31: "El mundo de hoy”
Hora: 5 PM
Martes 27, 7 PM: Recital poético “Unidos por un mismo silencio”
Lugar: “Café Blanco”, Esquina Jr. Piura y Av. Huancavelica.

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Cine Foro
"Mariposa negra" de Francisco Lombardi
Ciclo: Cine peruano del siglo XXI
Forista: Miguel Monge
Lunes 19 de julio a las 7 PM
Centro Cultural Continental, Auditorio de la Sede Central, calle Real 125, Huancayo.
INGRESO LIBRE

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Portafolio
“Josué Sánchez”
Obra pictórica de Josué Sánchez, presentada por la intelectual huancaína Diana Casas
Martes 20 de julio a las 7 PM
Centro Cultural Continental, Auditorio de la Sede Central, calle Real 125, Huancayo.
INGRESO LIBRE

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Mesa de Trabajo
Producción de contenidos y sentidos, cine, radio y Tv.
Participan reconocidos productores
Jueves 22 de julio a las 7 PM
Centro Cultural Continental, Auditorio de la Sede Central, calle Real 125, Huancayo.
INGRESO LIBRE

miércoles, 28 de julio de 2010

SOLO 4, EDICIÓN 321 DEL 10 DE JULIO DE 2010

LO ÚLTIMO
Roger Jerí Hermosa, in memoriam

El reconocido guitarrista Roger Jerí Hermosa falleció la semana pasada, dejando un profundo vacío en el espectro musical de Huancayo. Se trataba de uno de los más virtuosos ejecutantes de la guitarra, cuyo dominio en la interpretación de este instrumento lo acercaba a la maestría. Ejecutor de amplia gradación, tocaba con la misma pericia tanto piezas académicas como populares. Murió en la absoluta pobreza, como muchos otros artistas, y habremos de acostumbrarnos a no ver más su figura delgada, sus manos huesudas, sus apurados pasos en las noches del centro. Su talento, sin embargo, perdurará por siempre en los anales de la cultura huancaína.



LA CITA:
Donde no hay horas libres, el arte y la ciencia mueren y todo progreso se hace imposible.

Bertrand Russell,
Los caminos de la libertad

Obituario: Roger Jerí (1)

(Edición Nº 321 del 10 de julio de 2010)

Roger Jerí Hermosa, maestro de la guitarra


Máximo Orellana Tapia

Quienes lo conocimos, reconocemos su peculiar calidad en el arte de tocar la guitarra: sus manos mágicas rompían el silencio de la manera más armoniosa y singular tanto si se trataba de un tema clásico de Bach, un tondero norteño o un huayno ayacuchano. Roger Jerí se ha marchado, dejando como claro ejemplo el de una persona que, a pesar de las crueles dificultades que tuvo que afrontar, siempre se mantuvo en pie gracias a su inquebrantable alma de músico.
Conocí al maestro Roger Jerí a principios de esta década, de manera casual, y el destino me dio la oportunidad de cultivar su amistad, de escucharlo y verlo interpretar la guitarra en diversas ocasiones, así como de intentar captar sus enseñanzas en la ejecución de ese maravilloso instrumento. Así fue como pude acompañarlo hasta sus últimos días en que estuvo hospitalizado.
Algunas veces lo vi llegar a mi casa físicamente cansado, triste, herido quizás, pero era suficiente que cogiera la guitarra para olvidarse de las ingratitudes del mundo y, al menos por un momento, convertirse en aquel árbol de palisandro erguido y fuerte que sólo crece en determinados lugares y de cuya madera se fabrican las mejores guitarras. Tenía esa capacidad de pintar las tonalidades grises de algunos días con colores de sonidos burbujeantes para la alegría espiritual, al punto que al escucharlo era posible evadir por un instante las mundanas preocupaciones.
La mayor energía para un verdadero artista viene de los aplausos, el reconocimiento, los homenajes. A Roger le faltaba eso. Muchas veces le oí decir cómo en nuestra sociedad gana espacio lo trivial, lo banal y vulgar, y que casi no hay oídos para cultivar lo elaborado y estudiado. Quizás esto lo sumió en la depresión más profunda de la que no pudo recuperarse jamás. Sin embargo, como todo buen artista, nos deja entreabierta la puerta de aquel sentimiento profundo y humano que solo el arte es capaz de moldear en quienes buscan asimilarlo y hacerlo suyo… No me equivoco si digo que siempre le deberemos mucho a este extraordinario artista.


Obituario: Roger Jerí (2)

(Edición Nº 321 del 10 de julio de 2010)

¡Aunque te cueste la vida!

Pío Altamirano M.

Caminaba por las calles de Huancayo cubriendo con sus nudillos ambos lados de su rostro, seguramente tratando de mantener calientes esas manos que interpretaban la guitarra como ninguno en nuestra ciudad. Más de uno pensó que se trataba de un indigente o de alguien que había perdido la razón. Las personas cercanas a él, amigos, discípulos o alumnos, podemos asegurar que se trataba de una persona lúcida y de un crítico mordaz del movimiento cultural huanca, y en particular de la música en Huancayo.
Se dedicó por años a la docencia particular de la guitarra académica. Hace seis meses perdió a la compañera de su vida y la depresión hizo presa de él. Por alguna o algunas razones, siempre se negó a la ayuda piadosa de sus amigos o colegas, cuya consecuencia lo llevó al extremo de su desaparición. Se negó también a brindar recitales y conciertos, pero soñaba con un reconocimiento grandioso a su labor en una actuación memorable en un concierto de gala que él imaginaba. Creo particularmente que no se trataba de un concertista soberbio o creído que no quería compartir su genio con el pueblo, sino más bien de alguien con una manera particular de entender la dignidad, y seguramente, con algunas dificultades al momento de encarar los escenarios. Los que tuvimos la suerte de conversar con él, y sobre todo de escucharlo en alguna rara presentación o reunión en particular, nos quedamos con la imagen de uno de los más grandes músicos que ha acogido nuestra ciudad.
Y como en la mayoría de los casos, partió en la casi total indigencia. Sólo la bondad y afecto de sus más cercanos amigos lograron mantenerlo en sus últimos días postrado en un hospital, negándose a seguir viviendo. Es un drama cotidiano en nuestro medio, indolente y ajeno a la labor de sus artistas, encumbrados en sus horas de éxito y olvidados en sus postreros años de vejez. Roger Jerí forma parte ahora de la memoria de aquellos otros grandes que nos dejaron en esta década, como Panchito Leyth, Nicolás Antialón y Zenobio Dagha.
Hasta la eternidad, amigo y maestro.

El buen salvaje

(Edición Nº 321 del 10 de julio de 2010)

Dictaduras, los desgarros del mundo

Sandro Bossio Suárez

Han sido las dictaduras, qué duda cabe, las que han traído atraso, corrupción, crímenes de diverso nivel a nuestra empobrecida patria, al continente y al orbe en general. No existe totalitarismo eficiente, salubre, porque el poder, o el dogma que los motoriza, socavan sus andamiajes, y el pudrimiento político se abate como una lluvia torrencial sobre la sociedad.
Gran sabiduría la de George Orwell al imaginar, en su famoso «1984», una tiránica república comunista en la que los ojos del déspota se encuentran en todo lugar, y sus habitantes están prohibidos de enamorarse, debiendo vivir sólo para trabajar en las fábricas de producción. Si ahondamos en esta novela, nos daremos cuenta que cuarenta años antes, Orwell había previsto al tirano señor de los campos camboyanos, Pol Pot, quien personificó en la realidad esa apocalíptica ficción: dirigente de la guerrilla maoísta de los Khmers rojos, al derrocar al príncipe Norodom Sihanouk, en 1975, impuso en Camboya un régimen absolutista que duró cuatro años, durante los cuales ejerció el más grande poder sobre sus habitantes. Esta siniestra dictadura (comunista como en la novela) es uno de los ejemplos de la irracionalidad política del siglo XX, pues empujó a la migración masiva, mató a más de un millón de personas y dejó en su país un horroroso legado de crueldad y desolación.
Pero Pol Pot no ha sido el único corruptor de los derechos humanos: el régimen de Nicolae Ceaucescu, también militante comunista, llamado el «conducator», es otro ejemplo de dictadura despreciable. Una vez en el poder, Ceaucescu se corrompió, asesinó a miles de gitanos, persiguió a sus enemigos políticos, torturó a millones de opositores, y mientras tanto se dedicó junto con su familia a expoliar Rumania y a exaltar su imagen como solía hacerlo Stalin, otro autócrata que le debe millones de vidas a Rusia.
La República Popular China tampoco concilia con los vientos nuevos que soplan en el planeta: para ella los derechos humanos, sencillamente, no existen. Claro es el ejemplo que nos dieron sus veteranos del Partido Comunista Chino, principalmente Deng Xiaoping, cuando, en 1989, ordenaron abrir fuego contra los universitarios de la Plaza Tiananmen, acusándolos de «reaccionarios» y de haberse confabulado con «potencias extranjeras» y con el gobierno del Kuomintang de Taiwán.
El extraordinario escritor cubano Reinaldo Arenas, homosexual para su desgracia en una sociedad homofóbica, acusa a Fidel Castro de haberlo secuestrado, prohibido de escribir, maltratado en toda su condición humana, al punto que cuando se suicidó aseguró que el culpable era el eterno dictador de Cuba.
América Latina, infortunadamente, ha experimentado muchas formas de dictadura: la agrarista (José Rodríguez en Paraguay), la positivista (Porfirio Díaz en México), la desarrollista (Pérez Jiménez en Venezuela), la fascista (Perón en la Argentina), la capitalista (Pinochet en Chile), la civilista (PRI de México); y así, una larga lista sigue construyéndose en la vereda opuesta a la de los Derechos Humanos: Hitler, Stroessner, Duvalier, Trujillo, Homeini, Pahlevi, Suharto, Odría, Bokassa, Somoza, Pinochet, Franco, Videla, Fujimori.
Que a nosotros no vuelva a ocurrirnos.

Arqueología de Huancavelica


(Edición Nº 321 del 10 de julio de 2010)

La expansión territorial de los Wankas

Arturo Mallma Cortez

Hay dos áreas geográficas de la provincia de Huancavelica, ambas totalmente opuestas en su ubicación, pero idénticas y peculiares en su relieve. En las dos se encuentran gran número de sitios arqueológicos completamente abandonados. La primera corresponde a Colcabamba Alta (provincia de Pampas), donde hallamos Apata Orqo. Desde las alturas de este asentamiento preinca se puede observar la ruta que conduce a la selva baja, en la parte este. La segunda corresponde al distrito de Conayca (provincia de Izcuchaca), donde están Conayca Pata y Cani Orqo, un cementerio de origen preinca en la actualidad completamente abandonado, que los huaqueros han saqueado impunemente. Esta segunda área se encuentra al lado oeste.
En 1989 llegamos a Acostampu, donde hallamos cerámica Inca (fragmentos de superficie), y corroboramos las afirmaciones de los cronistas hispanos de que en este lugar los arquitectos incas planeaban construir un ‘Nuevo Cusco’, es decir, un centro administrativo inca, como Hatun Xauxa (Jauja), Tarmatampu (Tarma) y Pumpu en Chinchaycocha (Junín). Pero también corroboramos que los Wankas se expandieron hasta una parte de Huancavelica, en las dos áreas descritas anteriormente, donde hallamos cerámica típicamente Wanka.
Víctor Navarro del Aguila, en su obra “Las tribus de Anccu Wallokc” (Navarro del Aguila, 1939), intentó de deslindar geográficamente a tres grandes curacazgos: Pocras, Chancas y Wankas; y trata sobre las guerras expansionistas de las élites regionales de esa época, determinando las fronteras étnicas de estos tres grupos: a los dos primeros los ubica en las provincias de Huamanga, Cangallo y Víctor Fajardo; a los Chancas en Andahuaylas y a los Wankas en Huancavelica. Considera también a un grupo menor de los Pocras como parte de la tribu de Anccu Wallokc, llamado los Willkas, que ocupaba desde Willkas Wamán (fortaleza de Vilcashuamán), en Ayacucho, hasta Kunayka (Conayca), en Huancavelica, y conformaban el territorio de los confederados Wanka Willkas (de ahí surgió el nombre de Huanca Vilca o Huancavelica).
Lavallée en 1978 estudió a los Astos y determinó que se desarrollaron hacia el Intermedio Tardío. Sobre esta propuesta refinamos la secuencia cronológica y, de acuerdo al análisis de los materiales hallados, podemos afirmar que los Wankas influenciaron la sociedad y economía de los Astos desde inicios del Intermedio Tardío (1050 d.C.- 1250 d.C.), pues la cerámica hallada del estilo Matapuquio es propia de los Wankas, y de acuerdo a la clasificación del arqueólogo norteamericano David Browman, corresponde a esta fase. Posteriormente los Wankas van a tener la supremacía en estas áreas, encontrándose restos materiales de las fases Arhuaturo (1250 d.C. - 1460 d.C.) y Arhuaturo Inca (1460 d.C.- 1532 d.C.). Antes de estas fases consideramos que los Astos tuvieron un desarrollo con cierta autonomía.

Perfume de mujer

(Edición Nº 321 del 10 de julio de 2010)



Le aconsejé que se acostase, y consintió, sirviéndole yo de doncella. No había arreglado su pelo y bien pronto sus cabellos cayeron sueltos sobre sus espaldas, y su garganta descubierta: yo la besé, ella se dejó caer en mis brazos, y sus lágrimas volvieron a correr. ¡Oh Dios, qué hermosa estaba! ¡Si la Magdalena era así, debió ser mucho más peligrosa como penitente que como pecadora!

Pierre Choderlos de Laclós, Las amistades peligrosas

Entrevista: Lucía Zorrilla, ganadora del Premio Felizh de cuento

(Edición Nº 321 del 10 de julio de 2010)

“Siempre me voy a sentir más cómoda como lectora”

En el cuento “Monsieur Wylie” no sólo la temática, sino la influencia de Bolaño son muy marcadas. ¿A qué otros autores sigues?
Bolaño siempre me ha parecido interesante, sobre todo ahora que es un boom literario en varios países. Es la imagen viva del escritor romántico que vivió solo para escribir sin importarle nada más. Esa leyenda de que vivía de los premios literarios que ganaba en la década del ochenta en España me parece fascinante. En realidad a mí me gusta leer de todo, no sólo literatura, sino libros de historia, de sociología, revistas, libros de cocina, en fin. Pero en literatura me gusta mucho sin duda Vargas Llosa y Jaime Bayly, aunque Iván Thays diga que sus libros son el mayor derrame seminal de la literatura peruana. Ahora último estoy hechizada con la novela “Tokio Blues”, de Murakami, que me parece alucinante, conmovedora y muy sencilla de leer.

Formas parte de un grupo de nuevos narradores cuyos temas narrativos se alejan mucho más de la realidad inmediata. ¿Sucede únicamente en “Monsieur Wylie”?, ¿cómo es el resto de tu obra?
En realidad no tengo una “obra”. Son cuentos sueltos que no tienen un eje narrativo en común, que he escrito en el colegio y la universidad. Me considero, para serte franca, más lectora que escritora. Además con el trabajo y todos lo ajetreos de una maestría en mi carrera profesional por ahora no veo la factibilidad de dedicarme a escribir profesionalmente. Lo hago como una especie de hobby, como una forma de divertirme, de reinventarme a mí misma, de crear situaciones que ojalá puedan pasarme, de crear ficciones que tal vez yo sola pueda entender.

¿Opinas que un narrador, como originario de la sierra central, podría centrar más su obra en los problemas propios de su región?
No necesariamente. Uno puede escribir de lo que mejor le parezca, sepa, y sobre todo le guste. No creo que siendo de Huancayo o de otro lugar tenga que escribir acerca de la ciudad, de su gente y sus problemas. Además estoy convencida que ese tipo de literatura “comprometida” o de “denuncia social” es algo súper demagógico y no va conmigo para nada. Cuando uno escribe ya sea un cuento o una novela puede ambientarla en el lugar que mejor le parezca, puede inventarse un escenario ficticio, lo importante es que escriba y lo que lo escrito guste a quien lo lea.

En este cuento se hace un retrato bastante mordaz del oficio de editor y agente literario. ¿Como autora guardas una opinión similar de los editores y agentes?
Como te digo, yo no estoy muy involucrada en el mundo cultural. O sea, no voy a presentaciones de libros, ni tampoco me interesa conocer a escritores famosos. Más que conocerlos e idolatrarlos, me interesa leerlos. Creo que me siento mucho mejor en el anonimato y la soledad. Además, yo aún no me considero “autora”, pues no he publicado nada. Lo poco que sé de literatura es por los blogs y por los libros que leo. Lamentablemente, mi trabajo no me da el tiempo para asistir a eventos culturales, el poco tiempo que me sobra lo dedico a leer y a escribir.

“Monsieur Wylie” es un cuento bastante maduro. ¿Qué otras obras guardas aún? ¿Piensas publicar algún libro próximamente?
El año pasado quedé finalista también en este concurso, así que junto con Monsieur Wylie digamos que tengo dos cuentos publicables. Es cierto que guardo unos cinco cuentos sueltos de temáticas muy distintas, son monólogos más intimistas y digamos que este cuento que ganó el premio es el único con esa tendencia metaliteraria que he escrito. Si algún día me decido publicar tendría que juntar todos estos cuentos. La verdad, no veo muy cercana la publicación de un libro. Por lo menos por ahora.