martes, 6 de septiembre de 2011

Solo 4, “381”, del 03 de setiembre de 2011

LA CITA
“Cuando mires al cielo, por la noche, como yo habitaré en una de ellas, como yo reiré en una de ellas, será para ti como si rieran todas las estrellas. ¡Tú tendrás estrellas que saben reír!”.
Antoine de Saint-Exupéry, El principito

LO ÚLTIMO

I Concurso Nacional de Novela Corta “Premio Ciudad Incontrastable - 2011”
La Municipalidad Provincial de Huancayo y el sello editorial Bisagra Editores, con el propósito de contribuir al desarrollo literario y cultural de la región centro del Perú, convocan al I Concurso Nacional de Novela Corta “Premio Ciudad Incontrastable - 2011”, donde podrán participar todos los escritores peruanos mayores de edad, con temas totalmente libres.

El Jurado es presidido por Carlos Calderón Fajardo, acompañado por los también escritores Julián Pérez y José de Piérola. El premio del certamen consiste en la suma de S/.6000 Nuevos Soles, más diploma de honor y la publicación total de la obra. Las bases completas las podrán encontrar en nuestro blog y en el de Bisagra Editores, además, en el perfil de Facebook “Suplemento Solo 4”.

¿La Tunantada de Huancayo y el Santiago de Jauja?

Francisco Mucha
Como explicar este hecho: ¿por qué cada vez, con mayor frecuencia, se baila Santiago en Jauja y Tunantada en Huancayo?
En Huancayo, se cultiva una danza social de resistencia cultural, dedicada a los “wamanis”, o cerros, y al marcado de los animales, que a la llegada de los españoles fue calificada como pagana, pero que la inteligencia y sabiduría del poblador del valle hizo que perdure hasta hoy con una fórmula muy simple: colocar cruces en los cerros y ponerle el nombre del santo a caballo: Santiago. Más al norte, para los descendientes de los “Xauxas”, está la Tunantada, danza dramática cuyo origen todavía no está definido, de extraordinaria música sensible, con la elegante expresión de sus personajes enmascarados, cautiva a propios y extraños; es su carta de presentación.
El estudioso Raúl Romero asegura que: “El proceso del mestizaje en el Valle del Mantaro se aceleró desde comienzos del siglo XX, al resolverse los conflictos entre indios y mestizos, los unificó. Ayudó a preservar el lenguaje quechua y sus tradiciones culturales”. Por otro lado, Brayan Roberts y Horman Lon aseguran que la migración del poblador del valle, iniciada en 1901, por los enganchadores hacia los asientos mineros, entre ellos Morococha, tuvo un giro en su dirección desde 1940. El nuevo destino fue Huancayo. Entonces, las relaciones del poder económico de la Incontrastable se abren paso en la región. Merced al inicio de su desarrollo comercial, su intercambio económico con Lima empezaba a crecer.
Es más, la década del 60 registra un hecho determinante: la aparición de la Universidad Nacional del Centro del Perú, haciendo más atractivo su destino. Entonces, los campesinos de los pueblos, también de Jauja, que migraban a las minas de Morococha, aunque solo por temporadas, no tienen mejor idea que orientar su búsqueda de crecimiento económico y social en esta ciudad, asentándose principalmente en los distritos de El Tambo, La Florida, Pio Pata o la ciudad universitaria.
Cuando José María Arguedas llegó al Mantaro descartó una idea equivocada que tenía sobre el proceso de mestizaje en el valle: no encontró, en el paso de indio a mestizo, a pobladores atormentados, como pensaba, y refiere Raúl Romero, sino a un mestizo económicamente exitoso, alegre, orgulloso, con una cultura popular creativa y propia, pero con un proceso de modernización en su folclor donde aceptaba elementos venidos de occidente. Su diseño y organización, sistema de fiestas con santos católicos, instrumentos musicales que acompañaban a sus celebraciones: La Tunantada y el Santiago ejecutados por arpas, violines, clarinetes y saxos de procedencia europea.
Actualmente, es curioso cómo en Huancayo, en mayo, el mes de las cruces, ya no solo se danza la Chonguinada, sino que desde hace algunos años se inició una metamorfosis. Como fin de fiesta, las tonadas de la Tunantada toman cuerpo. Hoy, la Chonguinada acoge como propio el personaje del “chuto” que pertenece a la Tunantada. También se combina la una con la otra, durante la Fiesta de las Cruces de Mayo, en algunos lugares de Huancayo, o se da el “dos por uno”; osea, dos días de Chonguinada por uno de Tunantada.
¿Será que la música sentida y de gran plasticidad de los jaujinos cautiva tanto en Huancayo? Por otro lado, la Herranza, danza ritual y de resistencia, queda paulatinamente relegada. Distritos como Masma o Janjaillo, bastiones de ésta, se abren al Santiago, y ni que decir de pueblos como Muquiyauyo o Yauli, donde anualmente, desde algunos años atrás, en agosto, se desarrollan concursos o festivales de éste. En Jauja, entre agosto y setiembre, en los distritos o en algunos barrios de la misma capital de provincia, llevan al “santo cabalgado” a la iglesia, con el agregado del ingenio popular. La misa es “compartida”, ya que es oficiada también para el alma de los seres queridos que se fueron.
El vestuario de fiesta tiene las mismas características que en Huancayo y es alquilado en tiendas cerca de la plaza principal. La orquesta de pocos músicos da licencia al baile, aun cuando no se tenga animales, “ni siquiera un cuy que señalar”; también es huancaína, principalmente.
“La modernización de una sociedad globalizada tiene como efecto la homogenización de las culturas, agrupándolas en una sola”, dice el estudioso Barth. Asegura que los contenidos culturales de un grupo definido pueden cambiar con el tiempo. Aunque existe una salvedad. La conciencia étnica y las identidades múltiples de los pobladores están ligadas, también, a su demarcación territorial, historia, proyectos, arte y su lenguaje. ¿Seguiremos asegurando que la Tunantada sigue siendo de Jauja y el Santiago de Huancayo?

Industrias culturales: un debate necesario

Alberto Chavarría

Muchos, aún hoy, creen que la cultura es solo una cuestión espiritual o intangible. No logran comprender que la cultura, como muchos bienes, pueden ser objetos, sean reales o abstractos, sujetos a las leyes del mercado o del proceso de Producción-Distribución-Consumo. Si se entiende la idea económica de sector de servicios en su amplitud se podrá visualizar, con mayor acierto, lo que señalamos.
¿Cómo puede la cultura ser un producto económico? Por lo pronto la educación privada, y por ese rumbo se conceptúa la educación nacional actual, es un buen ejemplo de ello. Lo que se vende son servicios formativos e instructivos. Esa prestación, sea de modo personal o como colectividad, se paga. Lo que se puede discutir es la calidad de dicho servicio.
Del mismo modo, los objetos artísticos (cine, teatro, literatura, pintura, música, etc.), el entretenimiento, la diversión, lo espiritual, como la filosofía y la religión, al ingresar al P-D-C, que señalamos más arriba, necesitan capital para realizarse como productos y convertirse en riqueza, en los dos sentidos: espiritual y material.
¿Destruiría la cualidad artística, estética, del objeto de arte pretender convertirlo en un producto cultural? La respuesta es sí y no, al mismo tiempo, todo depende. Con los casos del cine y la literatura lo ejemplificaremos. ¿Se puede hacer cine sin capital? Es obvio que no. ¿El capital determinará si es una obra de arte o no? Ahí dependerá del director, de su compromiso con el arte, de su formación estética. El cine independiente, que cuestiona al criterio Hollywoodense, es la mejor muestra de que el capital no es determinante en la orientación artística. Y películas de este corte abundan, aunque no en el circuito puramente comercial. El verdadero cinéfilo sabe buscar y encuentra calidad.
Es claro que los “best seller” literarios son numerosos. Sus autores buscan dinero y fama fácil. Sin embargo, entre esa maleza la verdadera literatura se abre paso. Ambos son productos culturales, la diferencia está en su calidad estética, su lenguaje y su propuesta artística. Lo mismo podemos decir de las demás artes.
En consecuencia, por lo masivo de su difusión y consumo, el producto cultural acerca al gran público a la cultura. Ahí generar debate para discernir la buena de la mala cultura es tarea de los interesados en la verdadera cultura. Pero, para abrir los espacios es necesario que haya industrias culturales, sectores económicos que fortalezcan dicha Producción-Distribución-Consumo en formalidad. Hoy existen, pero informales. Y en ello el creador y artista pierde mucho.
Mucha de esa informalidad está asentada en la idea de que la cultura es antieconómica. Y, claro, cómo no lo va a ser si los consumidores de cultura, especialmente en provincias, creen que la cultura debe ser gratis, que los libros deben regalarse, que el teatro no debe cobrar, que el músico y cantante deben hacerlo sin costo. Todo en la idea de que son artistas y viven del aplauso. Una dirección más definida hacia las industrias culturales de parte de los involucrados cambiaría todo este panorama y beneficiaría a todos, especialmente en lo espiritual.

Los consumidores de cultura, especialmente en provincias, creen que la cultura debe ser gratis, que los libros deben regalarse, que el teatro no debe cobrar.


COLUMNA: El folclor que yo vi

El “chapracuy”

Luis Cárdenas Raschio

Me invitaron a la fiesta del Señor Ccechccamarca de Izcuchaca, no perdí la ocasión y me fui a la fiesta durante tres días. Gocé de la víspera, donde servían calientitos y ponches sumamente agradables, bailando cuando quemaban los castillones al compás de una banda. Al amanecer del día principal nos sacaron de la cama a las 5:00 a.m. con la cantidad de cohetones que revientan al llegar el alba. Después de un suculento desayuno, con Mondongo, café con bollitos y panes riquísimos, especialmente preparados para esta fecha, acudí a la misa de fiesta y a la procesión de la Cruz del Señor de Ccechccamarca, alrededor del parque. Terminada la procesión, se tiene un descanso de dos horas, luego la cruz es llevada a la parte más alta del cerro.
Lo que me llamó la atención fue la forma como se nombra al nuevo mayordomo. Tienen una urna de madera y en su interior está la imagen del Señor de Ccechccamarca pintada en una lámina de metal. Desde la época de la colonia, esta urna es colocada a la entrada de la iglesia y el devoto o devota que desea pasar la fiesta el próximo año, carga la urna y, acompañado de la orquesta, recorre el perímetro de la plaza; luego, los amigos y parientes, se hacen anotar con sus ofrecimientos de ayuda para realizar la siguiente fiesta. Algunos regalan animales: toros, carneros, víveres, árboles y el “chapracuy”, además de músicos y mucho más.
Esta vez contaré sobre el ofrecimiento del “chapracuy”. Esta costumbre se realiza de la siguiente manera: los sembríos, por lo general, descansan una temporada, en este tiempo se llenan de arbustos de molle u otras plantas que invaden toda la “chacra”. Faltando seis meses para la fiesta, el prioste con amigos y pobladores, después de un buen desayuno, al compás de dos “pincuyeros” (músicos que tocan “tinya” y “pincullo”) se dirigen a uno de los campos y en ella se forman tres grupos, el primero de los mayores de edad, otro de los jóvenes y el último de los más muchachos
Se comienza a cortar y extraer las plantas que invadieron la “chacra” —tiene que sacarse la planta desde su raíz—, luego se va haciendo una especie de ovillo inmenso entrecruzando las ramas. Esta acción es acompañada de abundante chicha, cerveza y caña. Cuando las ramas son juntadas y dan una dimensión de tres a cuatro metros, se comienza a hacer rodar los ovillos desde la parte alta hacia la carretera. Las ramas se desprenden del conglomerado y, entonces, hay que juntarlas nuevamente, previo trago; así, trascurre el tiempo hasta que llega a la carretera donde espera un camión para trasladar todas las plantas extraídas. En esta parte baja, cerca de la vía, espera la esposa del prioste con todas las señoras de la localidad, quienes han preparado el almuerzo. Después de comer, todos vuelven al pueblo bailando.
Las plantas que cortaron se secan durante seis meses y se emplean para preparar los ricos bizcochuelos y rosquitas para hacer llegar a todas las personas, dos meses antes de la fiesta para que no se olviden de su ofrecimiento. El primer día para los pobladores del pueblo, el segundo día para los amigos de Huancayo y a la semana siguiente para los de Lima. La próxima contaremos sobre el “llantacuy”.

Se comienza a cortar y extraer las plantas que invadieron la “chacra”, luego se va haciendo una especie de ovillo inmenso entrecruzando las ramas.

MICROCUENTO

El tiro libre
César Klauer
David había entrenado para ese momento desde que era un pequeñito de las divisiones menores. La técnica del tiro libre que él manejaba tan magistralmente, no le había resultado fácil de aprender. Se quedaba todos los días después del entrenamiento a practicar y patear, y patear, hasta la perfección. La pelota hacía una curva brutal. Y ahora el árbitro había abierto la puerta para que David les mostrara a todos de lo que era capaz. La pelota estaba en su sitio. El arquero colocó su barrera. David refunfuñó. Vio al entrenador. Miró a sus compañeros de banca. Cruzó los brazos.

PERFUME DE MUJER

El perfume
Patrick Süskind
La tendió en el suelo entre los huesos de ciruela, le desgarró el vestido y la fragancia se convirtió en torrente que le inundó con su aroma. Apretó la cara contra su piel y la pasó, con las ventanas de la nariz esponjadas, por su vientre, pecho, garganta, rostro, cabellos y otra vez por el vientre hasta el sexo, los muslos y las blancas pantorrillas. La olfateó desde la cabeza hasta la punta de los pies, recogiendo los últimos restos de su fragancia en la barbilla, en el ombligo y en el hueco del codo.

ARTÍCULO PRINCIPAL:

El curandero del amor
(fragmento)
Washington Cucurto
El curandero giró y le inyectó la sangre a mi ticki. Se desabrochó la manga y mientras gritaba, sangre, se clavó sin pestañar la jeringa en un brazo y ya esto era un toqueteo, un pinchaderío sin ton ni son. Se pinchaba y ya la pinchaba a ella y se volvía a pinchar y le daba mas sangre a ella. Era tanto el bardo y la desesperación que incluso vi cómo la pinchaba a la propia Maria sacándole sangre de un brazo y poniéndosela en el otro. "Lo importante es que la sangre fluya", dijo. Yo estiré mi brazo y me dio dos pinchazos pero ni por asomo asomó una gota de sangre. "Esta vacío", dijo. De brazo en brazo caían gotones de sangre que el curandero chupaba "para no perderla".
Al curandero se le cayó la peluca y se despegó de su traje de curandero y se sentó en un banquito.
— ¡La salvamos, pongan cumbia, carajo!
Yo me alegré de la vida. Salté al minicomponente Aiwa y puse Los Mirlos. Y sonó de casualidad el Poder Verde. Lo puse a volumen 55, la pieza retumbaba que volaba. Solo un aparato japonés puede poner la cumbia a 55 de sonido. El gran plan de los japoneses es que un día prendamos un Aiwa y volemos en mil pedazos. La cumbia se escuchaba hasta en la Luna.
— ¡El poder Verde!, gritó el curandero.
Teníamos los brazos dolorosos pero estábamos contentos.
Como si fuese un cuento de García Marquez, pero más divertido y con cumbia. Pos, qué es esta vida de hambre, sino puro realismo mágico al revés. Sea como sea, la cama de mi ticki se comenzó a elevar en medio de aquel cuartucho horripilante, mientras sonaba Eres Mentirosa. Golpeaba contra el foquito del techo e iba flotando de un lado a otro de la pieza, como una vez vi, que flotaba en llamas la cama de Frida Kalho, en una película yanqui. Y ustedes no lo van a creer, pero las cosas que pasan en las películas, también pasan en la vida. Si piensan que macaneo vengan a caminar por las calles de Constitución y verán que esto es ciencia ficción sudamericana.
—Esta es una curación doble. Hay que hacer la otra parte de la curación.
—¿Qué otra parte de la curación?, le pregunté. Yo lo miré al curandero trucho que no era otro más que el mismo hermano del vendedor de cds y a los cds los copiaban en el mismo Aiwa multipotente, en el cual ahora sonaba Lamento de la Selva. Che, que ahora me doy cuenta lo justo y hermoso que es el amor pese a todo, lo digo ahora que pasaron tres dias y ya me puedo sentar y caminar. Che, que no hay nada más justo en la vida que el amor y el sufrimiento. El curandero fue y quemó de nuevo en el microondas las pinzas y me dijo que el amor se hace entre dos y que para que no vuelva a ocurrir era necesario, que no dolería nada, que piense en María que al lado mío boca arriba, y yo boca abajo, me agarraba de las manos y sonreía y fue tan linda su sonrisa, pese a todo, fue una sonrisa de amor y alegría y comprendí que a pesar de todos los problemas, el amor es lo más lindo que nos pasa, pese a todo, y la cumbia no dejaba de sonar mientras yo me bajaba los pantalones, en el acto más justo de la vida, mientras el curandero del amor me metía las agujas hirvientes en el centro oscuro y acre y con olor a mierda de mi ser.
Era tanto el bardo y la desesperación que incluso vi cómo la pinchaba a la propia Maria sacándole sangre de un brazo y poniéndosela en el otro.


AGENDA SEMANAL

Conferencia magistral e inauguración de la exposición:
"Vivienda Wanka, todas las arquitecturas del valle"
Conferencia a cargo del Arq. Jorge Burga Bartra
Organizan: ICPNA Región Centro /Grupo Wanka Kawsay
Fecha: miércoles, 07 de setiembre
Hora: 7 pm
Lugar: ICPNA Región Centro - Jr. Ayacucho 169
INGRESO LIBRE